𝙏𝙪 𝙨𝙖𝙣𝙜𝙧𝙚 𝙚𝙨 𝙢𝙞𝙖
En un mundo gobernado por los demonios, todos buscan cazar a la niña al darse cuenta de su capacidad, entre peleas y enemigos, cierto albino cae rendido ante ella, el problema es que son de diferentes razas.
❀ T/N x Nor...
La joven de cabellos (c/c) caminaba a toda prisa en el lugar, algunos la miraban con extrañeza, otros con sorpresa, ella sentía su respiración agitada, respiraba entrecortadamente, sus ojos derramaban lágrimas, apretó su mandíbula soltando un leve crujido, detrás de ella se observó como hombres altos con máscaras la seguían, sus pequeños pies apenas podían avanzar, estaba cansada, en ese momento choco con alguien, se disculpó para seguir corriendo, sus ojos (c/o) se fijaron atentamente en una pila de madera, tomó su arco y le dio a las cuerdas, los troncos salieron girando tumbando a los perseguidores.
—¡No la dejen escapar!— gritó uno de ellos.
Esta soltó un jadeo, algunos intentaban detenerla, esta corría esquivandolos, empezaron a disparar flechas que lastimosamente la hirieron, gimió con dolor, miro de reojo, parecía que estaba acorralada.
—¡Qué quieren de mí!—exclamaste desesperada.
—¡Son órdenes de la reina! ¡Tu sangre sucia, debes morir!—apuntó a la pobre niña.
—¡Yo no he hecho nada! ¡No pueden matarme!
Esta volvió a correr, escapando lo más rápido que podía de aquel lugar, se perdía entre los árboles, escuchó él galopeó de los caballos, estaba en mal estado, estaba desesperada por escapar, quería tirarse a llorar, pero no podía hacerlo, no ahora que escapaba de todo esto. Ya no se escuchaba nada, pero sentía un escalofrío, con sus temblorosas manos tomó su arco ya desgastado, sin embargo grito al ver como un demonio se acercaba. Comenzó a correr lo más rápido que sus pies le permitían, estaba cansada y no sabía donde esconderse, pronto su pie quedó atorado en una raíz, maldijo en voz baja.
Sentía miedo y adrenalina recorriendo su ser, el monstruo hambriento se acercaba a ella, sabía que el destino de esa criatura sería cruel, pero para eso debía comérsela y eso era lo que no quería. El sudor frío caía de su frente, con su esfuerzo empezó a romper la rama, pronto ésta crujió y se rompió permitiéndole salir, sin embargo cuando iba a disparar una flecha alguien atravesó a esa criatura.
Tenía que escapar, los demonios tanto salvajes como inteligentes la acechaban, maldijo a esa raza, maldijo no tener un escape, incluso maldijo su jodida vida.
—¡Ahí está! ¡¡Síganla!!— grito un demonio.
—¡¡Púdranse!!— grito enfadada.
Pronto escucho las pezuñas de un caballo por el suelo, todo fue tan rápido que no pudo reaccionar, alguien la tomó del brazo y ya se encontraba en el lomo del animal, escuchó un "Sujétate" del jinete, ella no protesto, miro como los otros demonios la perseguían sin esfuerzo alguno. Suspiro aliviada y cansada, pronto cerró los ojos simplemente sintiendo el aire golpear su rostro.
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La (c/c) abrió los ojos, se encontraba recostada en el suelo, una manta la cubría, se sentó sujetando su cabeza, miró su alrededor, estaba en el subterráneo, miro una linterna, quitó la manta y se levantó levemente, estaba extrañada, había sido salvada, estaba agradecida claro, pero no sabía si confiar. Escuchó unos pasos acercándose.
