Play Time

Deja de fingir

- ¿Disfrutaste tu jueguito, Louis? - Harry habló muy serio, con ambas manos sosteniéndolo fuertemente de la cintura - Contéstame.

Louis se acobardó por un momento cuando vio esa profunda mirada en los ojos de Harry, y eso sin mencionar que todavía tenía su polla enterada hasta el fondo de su trasero, pero estaba seguro de que tenía razón en molestarse con Harry.

- ¿Y tú disfrutaste tu llamada? - Habló mirando a Harry a los ojos, sin dejarse intimidar - Parecías algo distraído - Fue sarcástico, con una media sonrisa en los labios.

Louis no pensaba ceder, pero entonces, sin aviso, Harry levantó bruscamente la cadera, haciendo que su miembro entrara todavía más profundamente en el agujero del ojiazul.

- ¡Harry! - Louis prácticamente gritó, por la sorpresa y la sensación, apretando los hombros de Harry por el placer, aunque eso no lo iba a admitir,

- Si quieres jugar, vamos a jugar, Louis - Harry sujetó la barbilla del ojiazul con firmeza - Play Time.

Louis todavía no procesaba las palabras de Harry cuando éste los giró a ambos en un segundo.

Ahora Harry estaba encima de Louis, quien había aterrizado de espaldas en el colchón. Con el movimiento el pene de Harry había salido de Louis, y eso junto con la sorpresa lo hizo jadear.

- Estás loco, no podemos jugar justo ahora - Dijo Louis un poco mareado.

- En cualquier momento y lugar, Louis - Harry sonrió - Eso dicen las reglas.

Louis se sintió nervioso de nuevo, ¿esta situación no era lo suficientemente comprometedora por sí sola? ¿Cómo es posible que Harry siempre elija los peores momentos para decir esas estúpidas palabras?

Pero Louis seguía enojado, y no pensaba dejarse intimidar - ¿Qué estupidez me vas a obligar a hacer ahora?

Harry sonrió triunfante - Nada elaborado, bonito - Habló despacio, sin dejar de sonreír - Vamos a emparejar las cosas - Cuando dijo esto, se levantó de la cama.

Louis dejó de sentir la piel del rizado contra la suya, y la sensación no le agradó, pero eso era algo que no iba a admitir.

Harry caminó hasta su armario, abrió un cajón, y Louis reconoció enseguida lo que había sacado de éste.

El rizado volvió y se quedó de pie junto a la cama, frente a Louis, quien ya estaba prácticamente sentado en el colchón - Levántate.

- ¿Para qué? - Preguntó Louis, poniéndose de pie frente a Harry.

Lo primero que pensó fue en cómo Harry ni siquiera había contestado su pregunta, y aún así él había obedecido, pero trató de no darle muchas vueltas a ese pensamiento.

Ambos estaban desnudos, pero Louis no sentía vergüenza - Voltéate - Harry habló mientras acariciaba el labio inferior de Louis con el pulgar, como si se debatiera internamente lo que deberías hacer con él.

El contacto hizo que Louis separara los labios, mirando directamente en los ojos de Harry, y lentamente se giró para darle la espalda.

Sintió las manos de Harry acariciando sus hombros y giró la cabeza para verlo - Tus manos - Habló el rizado cuando sus miradas se cruzaron de nuevo.

Louis no entendió lo que Harry le pedía, pero las estiró frente a él mientras hablaba - ¿Qué con ellas?

Entonces Harry lo tomó de las muñecas y lo hizo mover sus brazos hacia su espalda; y Louis sintió cómo enrollaba una tela al rededor de sus muñecas.

Reconoció la familiar sensación de la tela contra su piel, era esa misma bufanda roja que Harry había utilizado para cubrirle los ojos en el primer nivel.