Capitulo 28 La Perdí.

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Nícolas.

Después de aclarar las cosas con los Courman, me dispuse a buscar a Alex, la estuve buscando por un rato hasta que la vi a lo lejos hablando con mis hermanos.

Estaba a unos cuantos pasos de ellos, cuando pude escuchar algo de su conversación.

– Veras,  mi gemela es un poco posesiva con nosotros, es la típica niña mimada, y siempre le ha gustado controlar con quienes salimos, y Sofi es una vieja amiga de la familia, ella y Níck tuvieron algo hace unos años, pero Cami creyó que trayendo a Sofi hoy, él se olvidaría de ti.

Ella solo río, esa risa no me daba buena espina, sobretodo después de lo que le dijo Connor.

– Creeme, que entre su hermano y yo no existe absolutamente nada, nunca hubo y nunca habrá, solo somos capitanes de equipos al igual que compañeros, pero ni siquiera a amigos llegamos. En cuanto a ustedes, me caen bien, no tienen porque pagar los errores de su hermano, eso es muy admirable, pero también muy estúpido chicos, porque si su hermano de verdad se hubiera querido disculpar, el que estaría justo aquí hablando conmigo ahora, sería él, y no ustedes.

Cuanta razón tenía ella en lo de que mis hermanos no deberían estar allí disculpándose, sino yo. Aunque debo admitir que sus palabras me dolieron en el alma, pero sé que las merezco.

Ella se dio la vuelta dispuesta a irse y yo estaba dispuesto a perseguirla. Pero justo cuando iba acercarme le y que me viera, llego Sofi de la nada.

– Es cierto, eres demasiada poca cosa para él, si de verdad te quisiera ya estuviera aquí, a nadie le gustan las brujas como tú, pero que se le va a hacer, si ya para ti es fácil.

Ella estaba de espaldas a Sofi, y se podía notar la tensión en sus hombros.

Se volteo lentamente y la miró como si fuera el bicho más insignificante que había, su mirada refugia más de lo normal, y su porte era seguro.

Y apenas empezó a hablar, supe que las cosas no terminarían bien para Sofi.

– Si, ¿sabes?, si yo soy poca cosa, ¿por  qué él no está aquí contigo, sino buscándome?, porque te aseguro que eso está haciendo, ¿ Por qué sus hermanos se preocupan por mí, sin aun conocerme realmente?, el echo de que él no esté ahora mismo aquí no quiere decir que no me quiera, cosa que no me importa realmente, ni que tampoco le guste, porque chica ¿tú me has visto?, hasta yo misma me gusto por dios, así que date tu lugar. Y no, creeme que ser bruja no es nada fácil, pues es tener personalidad, glamour, elegancia, coquetería, hechizo y ese toque de embrujo en la mirada que enloquece y enamora. Y tú mi vida, no lo tienes, ¿ nunca has visto la película del pato Donald?, pues ese estúpido pato tiene más sentido común que tú, mi concejo amor, es que siempre escojas pelear una batalla que si puedas ganar.

Después de guiñarle el ojo, ella simplemente se giro y se fue.

Yo aproveche y me aproxime rápidamente hacia los chicos.

Al estar más cerca agarre a Sofi por el brazo y la acerqué a mí.

– ¿ A qué mierda estás jugando Sofi?.

Ella al verme abrió los ojos como platos.

– Na.. Nada Níck, ¿ Por qué preguntas eso?.

– No te quiero volver a ver cerca de Alex, te quiero mucho Sofi, pero todo ese cariño y amistad de años se puede ir a la mierda como te vuelva a ver u oír que estás cerca de Alex, ¿ Entendido?.

– ¿ De verdad te importa esa niñata?, es solo una estúpida niña pija y presumida.

– Ella es más mujer que tú, y como sigas hablando así de ella se me olvidara que te conozco desde los 9 años.

La veo tragar saliva y librarse de mi agarre.

– Te vas a arrepentir de esto Níck.

***************


He estado buscando a Alex hace casi una hora, sé que sigue aquí ya que me encontré con su madre y me dijo que la había visto hablando no hace mucho con el señor Mcwail.

Ya casi me estaba dando por vencido cuando veo a una castaña con un vestido negro alterando la paz con el va y ven de sus caderas.

Corro rápidamente hacia ella y la llamo antes de que se vaya de la fiesta.

– !!Alex!!.

La llamo pero parece que no me oye, así que corro un poco más y la atrapo antes de que logre bajar las escaleras.

– Hola.

Ella me ve durante unos segundos como asimilando lo que acaba de oír.

– ¿ Hola?, ¿ En serio?, ¿ Es lo más original que se te ocurre?.

El tono de su voz hace que tenga ganas de huir, diablos, se que la cague, y es por eso por lo que estoy tan nervioso.

– Yo... Yo...

– Tú.. Tú...¿ Tú qué?.

– Lo siento.

– ¿Lo sientes?, ¿ Y qué es lo que sientes dime?.

– Siento lo de ésta noche, siento lo de la pasarela, no sabía nada, mi hermana la invito y yo....

– Y tú como buen hermano, amigo, novio, sobrino, primo, vete tu a saber  que coño más, simplemente les seguiste la corriente, que lindo, creeme que te admiro por ello, mira ve, hasta te lo aplaudo.

Ella se soltó de mi agarre y empezó a aplaudir durante unos segundos, yo no sabia que hacer realmente, pero debía de saber una cosa.

Ella dio media vuelta con la intensión de irse, pero mi voz la detuvo.

– También oí lo que te decía Sofi y lo que tú respondiste..... ¿ Es cierto lo que dijiste?.

Ella se quedó de espaldas a mí y no dijo nada por un momento, pero al instante en el que la escuché, supe que ya todo estaba perdido.

– Adiós Nícolas.

La vi bajar las escaleras y llamar a alguien, a los segundos vi como un uber se estacionaba cerca de la acera y ella se acercaba a él.

La vi subir y alejarse y no pude hacer nada, yo había ocasionado todo esto, así que debía de arreglarlo, solo esperaba que aun no fuera demasiado tarde.



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