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Narra Pedri

Doy vuelta a el carro cambiando de rumbo y ella se confunde.

- ¿ a donde vamos?

- a mi casa- digo de la manera más casual.

- ¿ ah, si?

- pues no te voy a dejar congelándote afuera de tu apartamento.

Veo que ella sonríe y mira a la ventana.

Pedri la tienes ganada.

Deja su cabeza apoyada en el vidrio y poco después el auto pasa encima de un tronco haciendo rebote que se pegue contra el vidrio.
Me burló de ella y sigo conduciendo
Si... no me maten, obviamente me disculpe y le prometí que la próxima vez que me pasara algo a mi, ella tenía todo el derecho de burlarse, a lo que ella aceptó gustosa.

Tardamos unos buenos 10 minutos, puse la calefacción todo el camino para mantenerla a una buena temperatura ignorando el hecho de que yo me estaba muriendo de calor.

- sabes- llamo su atención- estás de suerte por que mi auto tiene la opción calienta culos, la activo y ella solo se ríe.

- de verdad que tienes todo lo que necesito- dice ella entre risas y me podría quedar mirándola toda la vida, lastimosamente soy el conductor y tengo que ver por donde voy.

Llegamos y bajamos de el auto, ella me agradece por quinta vez y yo solo le dedico una sonrisa.

- gracias por calentarme- dice casual y no puedo evitar reírme ante su comentario.

- OH DIOS- apenas se da cuenta de lo que dijo, es increíblemente hermosa pero también es un poco lenta.- no de esa manera lo sabes.

- ¿ no?- me hago el ofendido y ella se sonroja poniendo su cabeza abajo para después murmurar lo siguiente.

- si supieras....

- ¿ que?- la escuché

- ¿ que ?- se hace la desentendida y después me sonríe.

- te lo juro que me matas- bromeo y entramos a casa.

Tengo que aceptar que ya hablamos con más confianza, y ella no para de dejarme  unos comentarios tan fuera de lugar que no se me van de la mente.

Agradezco que Fer no esté en casa por que si la viera entrar seguro me molestaría, se la llevaría y le mostraría fotos vergonzosas mías, es que tengo un muy buen hermano....

Le ofrezco una toalla para que se seque y también una camisa con un pantalón corto para que se cambie la ropa mojada y no se resfríe.

Sale cambiada de el baño y me quedo perplejo ante la mujer que tengo al frente usando mi ropa.

- creo que ya es una costumbre que me des tu ropa- ella dice bromeando y sacándome de mi trance.

- creo que si...

Estuvimos hablando por un rato sentados en el sillón y todo bien todo normal, solo puedo pensar en sus labios pero no quiero que piense que la traje a casa solo para eso.

A la mitad de la conversación escucho un grito de su parte y casi que se monta encima mío.

- que pas....- no me deja terminar la frase por que señala algo y hay UNA PUTA ARAÑA.

grito yo también y cómo está encima mío la agarro bien y con ella en mis brazos me voy corriendo hasta la cocina.

- QUE ESPERAS MÁTALA- me grita ella.

- POR QUE YO!!!- yo seré muy romántico y todo pero no me voy a a acercar a esa cosa.

- ES TU CASAA

- Y QUEEE, NO QUEIRO MORIR

Antes de que ella pudiera responder entra Fer a la casa, y corre hasta la cocina para ver cual el el escándalo.

Narra Fer.

Que pensarían ustedes si su hermanito hormonal con rumores de novia trae un chica a casa cuando ustedes no lo están y al llegar a casa solo escuchan gritos, bueno en mi caso no se ni que imaginarme por que Pedri es alguien... ¿ como lo digo? Diferente.

- Pedri... conozco ese grito...- resulta que Pedri, siendo mi hermano lo conozco bastante bien, hasta el punto de tener una idea de que pasa cuando grita, están los gritos de perder en el fifa y también los de cuando gana, están los gritos de cuando esta tratando de hacer algo en la cocina y se quema y están... los de cuando ve una araña.

Ustedes lo ven muy lindo jugando a el fútbol y eso pero pónganle una araña en la cara y verán.

- Fer....- dice el en un tino bajito- solo te pido una cosa y es que saques a esa araña de aquí.

- mmm- me hago tiempo para molestarlo- ¿ y que gano?

- eso lo podemos discutir después pero porfa ayúdanos, Pedri no es muy machito que digamos.- habla ella por primera vez en esta conversación haciéndome reír.

- solo por que lo pides tú.- ya me pareció bastante maja la chica.

Mientras voy por la araña escucho que Pedri le habla en voz baja a la "misteriosa chica"

- como que no soy macho... eso no tiene nada que ver con mi miedo a las arañas ¡ te imaginas que sea venenosa!- le susurra Pedri a ella y yo aguanto una risa.

- cállate Pedri, me pudiste haber salvado y perdiste la oportunidad- el la baja de sus brazos pero ella no se aleja de el.

- ohh...

Golpe de suerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora