Dos mejores amigos son más inseparables que nunca, Hermione Brown y Aiden Webster, ambos en busca de su mejor año en el instituto, lo que ninguno sabe es que no son tan invisibles como creen, ¿qué tan excluida de la ecuación quedara Her con la nueva...
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Hermione
-¿Estas, segura de esto? -pregunta, pero luego añade sin dejar que responda-sé que nunca te retractas, pero debo preguntar antes de volverme cómplice de lo que piensas hacer.
-Tú lo has dicho, no me voy a echar para atrás, esto me emociona -digo sonriendo y tocando mis manos, volteo a verlo y digo -vamos arranca -cuando lo hace pregunto- ¿llamaste a tu tía?
-Cubierto -dice y levanta uno de sus pulgares.
- Oye Aiden no has pensado en limpiar un poco por aquí -digo levantando una lata de refresco que estaba junto a mis pies
-Lo pregunta la chica que convirtió su cuarto en un...espera que encuentre la palabra perfecta...okey sin éxito, ¿cómo puedo describir con palabras el desorden de tu habitación?
- Yo por lo menos tengo cosas buenas, no latas de refresco o un momento traes un cadáver contigo qué demonios es eso -digo al fijarme que en asiento trasero hay una manta negra cubriendo a algo con una forma extraña...
- ¿Eso?... a una pieza para algo...mi papá me dijo que se la llevara mañana, no tiene importancia, pero tú con que cosas buenas eh...
- Si cosas muy buenas de hecho-le aseguro él se voltea a verme y sonríe
-Limpiare para cuando vallamos de regreso -dice y estaciona
- Trato, yo limpiare mi habitación-me quito el cinturón y el abre mi puerta, bajo del auto y entro al centro comercial, detallo el salón de belleza de la tía de Aiden, no puedo creer lo que estoy a punto de hacer, quiero gritar de la emoción.
Entro y veo las paredes blancas, siento el frio del aire acondicionado llegar hasta mis huesos, puedo escuchar el sonido de una secadora cuando veo a la tía de Aiden le sonrió y camino hacia ella, quien me envuelve en un abrazo y luego pellizca una de las mejillas de Aiden.
-Muy bien cariño dime ¿qué tienes en mente? -dice mientras sonríe mirándonos en el espejo frente a la silla donde estoy sentada
Una sonrisa se dibuja en mi rostro para cuando respondo.
-Oye Her ¿cuál fue tu excusa por si tu mamá llama? -pregunta Aiden desde su asiento mientras revisa distraídamente su celular
- Tienes gato y está enfermo. -digo intentado estar seria
-Es la peor mentira que he escuchado en mi vida, pero iré practicando mi falso dolor por el gato imaginario que acabo de adoptar -me comienzo a reír y el igual, creo que él es la única persona con la que soy yo misma, esas risas y buenos momentos se repiten solo si él está conmigo, con otra persona me sentiría incomoda y estúpida, pero con el no, con mi mejor amigo no.
-Lista -dice mi buena estilista Zareen mientras me voltea para verme en el espejo.
-Es...perfecto -digo sin parar de verme -eres una diosa entendiste a la perfección -digo me pongo de pie y la abrazo.
