CoD||Headcanons

HC-Ghost||Estatura pequeña

Diferencia de tamaños con Ghost, versión baja.

•Para empezar, ¿han visto a este gigante? ¡Por nueve centímetros no mide los dos metros! Mejorando la situación, es más que obvio que recompensa su estatura con una exquisita contextura corporal.

•Apuesto a que su cuerpo varía entre la musculatura y un porcentaje de grasita adecuado, que tiene marcados sus músculos y que estos, a su vez, poseen cierta suavidad que no los convierten en una superficie brusca; la idea de un arquetipo de un fisicoculturista queda desechada.

•Dudo que Ghost se esmere realmente en mantenerse fiel a una dieta estricta de ensaladas, proteínas y carbohidratos; sus misiones constantes le llevarán a agradecer cualquier alimento que distraiga el hambre (aunque no creo que consuma chucherías o dulces, lo veo devorándose un buen bistec).

•Con esto dicho, podrás imaginar que serás una hormiga a su lado.

•Quizá no será evidente al momento de resaltar la diferencia de tamaños y estatura, todos pueden verlo, al fin y al cabo eres como dos cabezas más bajas que él. Cuando quiera molestarte no flaqueará dos veces para decir algo como: "—No te escuchas, estás lejos". O por ejemplo: "—Me duele la nuca, consigue un banquillo".

•Simon no lo admitirá en voz alta, pero adora poder manejarte a su antojo. En un momento puedes estar caminando sobre tus pies, al siguiente estarás colgando de un hombro, siendo secuestrada hacia su compartimiento de descanso.

•Maldición, eres tan pequeña en sus brazos, que a veces le nace un sentimiento de inquietud por pensar que podría quebrarte, aplastarle o romperte de algún modo.

•Cambia de opinión cuando lo invitas a reposar contigo, su peso no es un impedimento, más bien pareces disfrutarlo. Se deja caer entre tus piernas, apoyando su cabeza en tu estómago y rodeando tu cintura. Es una de sus posiciones preferidas, disfruta mucho de tu calor y de las caricias que haces en su cuero cabelludo.

•Regresando a las estaturas y diferencias de tamaño, si por cierto motivo estás tratando tomar un objeto que se encuentra en una estantería fuera de tu alcance, Ghost se divertirá en silencio, viéndote lidiar sobre las puntas de tus pies en un inútil intento de obtenerlo. ¡Ah! ¡Gozará esencialmente si estás brincando! No te preocupes si sientes una mirada intensa en tu trasero, cuando voltees podrás encontrarte con el inglés viéndote.

—¿Te gusta la vista?

—La aprecio bastante.

—No te vas a quedar ahí sin ayudarme.

—Estoy cómodo en la silla.

—Jódete, Riley —bufaste—, le pediré a Soap que…

•No habías finalizado cuando se puso en pie. Victoriosa, lo viste agarrar el frasco, ofreciéndolo en tu dirección. Para tu desgracia, justo cuando ibas a tomarlo, Ghost lo alzó sobre su cabeza, inclinándose peligrosamente hasta quedar cerca de tu rostro; incluso con el pasamontañas puesto se podía sentir sus respiraciones tibias.

•Ghost está consciente de que su estatura es un factor de intimidación para el resto, sin embargo dejarse pisotear por otros no es una opción para ti; lo aborreces. ¡Y por un demonio que ésto le fascina! Pues si bien puedes lucir como un chihuahua rabioso ante sus ojos, le encanta la manera desafiante en que elevas tu mentón y alzas tus cejas; eres una pulga admirable.

—¿A quién le ibas a pedir ayuda?

—Simon, nunca te han golpeado las pelotas, ¿verdad? Estoy perfectamente a la altura para hacerlo, no me tientes.

•Se vuelve a erguir, te da el frasco sin reprochar. Aunque no puedes ver más que ese semblante duro a través de su pasamontañas, apuestas a que ha esbozado una diminuta curva en sus labios.

•Te agarra de sorpresa cuando te vuelve a cargar, raptándote por segunda vez consecutiva.