╴XIII

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El silencio fue brutalmente cortado al escuchar como un juego de llaves se hacía presente al otro lado de la puerta del departamente, la azabache introdujo la llave que le daría libre acceso a su hogar para inmediatamente girar la misma, dejando que aquel pedazo de madera que refugiaba su casa les diera la pasada.

╴Bien, Niffty, este será tu nuevo hogar por ahora, ¿Quieres pasar a verlo? ╴Preguntó la de orbes ámbar a la par que se agachaba un poco para quedar a la altura de la infante, quien, con una sonrisa de oreja a oreja, asintió energética. La detective señaló con su mano la puerta abierta, invitando a la pequeña a entrar.

La castaña rápidamente lo hizo, observando el lugar con devoción y curiosidad rebosando en sus ojos, la más alta siguió sus pasos, cerrando la puerta detrás de sí antes de ponerle seguro..

Algo le decía que lo hiciera.

Inmediatamente comenzó a sonar el teléfono, ocasionando eco en el salón, que se extendía por el resto del piso, captando la atención de la propietaria.

╴Recorre la casa mientras atiendo el llamado, ¿Si, dulzura?

Niffty volvió a asentir, con esa energía que hace mucho tiempo había dejado de lado, rápidamente dio media vuelta y se dispuso a explorar aquel bello al igual que acogedor lugar.

La detective se acercó al teléfono, atendiendo la llamada con extrañeza.

Tenía un inquietante presentimiento que atoraba un nudo en su garganta.

╴¿Hol-

>> ¡T/N! ¡Carajo! ¡Finalmente contestas! <<

La voz agitada del contrario formó presencia, alarmando sus sentidos, alertando su ser. Se escuchaba asustado, hiperventilado... Angustiado.

╴¿Angel? ¿Qué pas-

>> ¡Te descubrieron! <<

Aquellas palabras, las cuales tanto tiempo temió escuchar, causaron que su corazón detuviera su latir por escasos segundos, su rostro perdió el color y sus entrañas parecían haber sido revueltas a la par que golpeadas.

El miedo paralizó su cuerpo, su mente.

>> ¡Tienes que salir de tu casa ya! ¡Saben donde vives, donde encontrarte! <<

Por un momento dejó de escuchar la chillona voz de su amigo, escuchando a cambio un molesto e inquietante silbido, suave, tranquilo...

Aterrador.

>> ¡Quieren algo de ti! ¡Tienes que salir de ahí! ¡¿Me escuchas?! ¿¡T/N!? <<

La angustia comenzó a carcomer su cuerpo, obligando a este a mantenerse sumamente quieto, no movió ni siquiera un músculo, ni se atrevió a soltar palabra alguna. Volvió a sentir lo que hace mucho tiempo se había obligado a bloquear.

Terror.

Con el pánico dueño de sus acciones y sentir, cortó la llamada, intentando procesar lo que recientemente le habían dicho. Alzó la mirada, buscando una escapatoria rápida y segura para poder sacar a la pequeña niña de ese espantoso lugar qué, sin quererlo, se había convertido en una trampa mortal.

Observó con detenimiento sus alrededores, intentando ignorar como las cosas parecían volverse más grandes y más pequeñas a su percepción, como las paredes comenzaban a dar vueltas, como estas parecían estar cada vez más cerca de ella, encerrando, sofocando, asfixiando.

No podía respirar, ¡Carajo, no podía respirar!

Intentó que el oxígeno volviera a sus pulmones, tomando bocanadas de aire, pero no parecía funcionar.

Rose Noire... | AlastorWhere stories live. Discover now