Capítulo 10

2.2K 179 3
                                    

—Por favor, Señor —Jimin gruñó mientras se aferraba a los brazos de Yoongi—. Por favor, ¿p-puedo correrme, Señor?

Yoongi casi se pierde justo ahí. No era posible que Jimin comprendiera lo que le hacía cuando le rogaba por su liberación. No había manera de que él pudiera entender lo poderoso que lo hacía sentir.

—Córrete para mí, bebé. —gruñó. Levantó las piernas de Jimin aún más, golpeando el dulce punto una y otra vez. Vio con una sensación de asombro cómo la cabeza del rubio se iba hacia atrás y gritaba su liberación, chorros de semen blanco perla salieron de su pene y se esparcieron en su pecho.

El dulce olor de la semilla de Jimin era todo lo que Yoongi necesitaba para empujarse al borde. Tomó los muslos del rubio lo suficientemente fuerte para dejarles una roja marca y gruñó, llenando a Jimin con su propia liberación. El cuerpo del más bajo temblaba alrededor de su pulsante polla.

Sus piernas temblaban con la intensidad de su orgasmo, Yoongi envolvió sus brazos alrededor de Jimin y se recargó en la silla, llevándolo con él. Frotó sus manos arriba y abajo de la sudada espalda del rubio mientras esperaba que la respiración regresara a lo normal.

La cara de Jimin enterrada en su cuello y sus manos en su cabello. Mientras su corazón recuperaba su ritmo, Yoongi se resistía a permitir que su flácido pene dejara el agarre de Jimin. Deseaba que hubiera un modo de seguir ahí, pero imaginó que podría verse un poco extraño caminando alrededor con el rubio empalado en su polla.

Yoongi acarició un lado de la cara de Jimin, levantando la cabeza para poder ver el interior de esos hermosos ojos miel.

—Nunca voy a dejarte, ¿sabes que no lo haré, Jimin?

El nombrado asintió, una pequeña sonrisa en la esquina de sus labios.

—Puedo parecer sumiso, Min, pero si incluso me dejas ir, descubrirás cuán poco sumiso puedo ser.

Yoongi levantó una ceja ante la declaración de Jimin. Interiormente estaba secretamente saltando de alegría. Afuera sin embargo...

—¿Estás siendo irrespetuoso, hombrecito? —dijo seriamente, tratando desesperadamente de esconder su sonrisa.

—No, claro que no, no puedo...

—Ssshh, relájate, bebé, solo estoy bromeando contigo —le aseguró cuando vio la mirada de preocupación—. Está bien. De hecho, me gusta ver que puedes pelear por mí.

Jimin se enderezó y miró a los ojos al pelinegro.

—Mira Yoongi, hay algo que necesito decir y no quiero que lo tomes a mal. No trato de ser irrespetuoso ni nada. Solo quiero que entiendas de dónde vengo. Y-Yo...

—Solo suéltalo. —dijo Yoongi, repentinamente nervioso.

Jimin tenía una extraña expresión como si le preocupara algo.

—¿Qué sucede, bebé? —preguntó suavemente mientras frotaba su pulgar sobre la mejilla del más bajo.

—Sé que ambos estamos de acuerdo en esta cosa de la Dominación/sumisión, pero...

—Jimin, si no quieres esto, nosotros podemos...

Jimin colocó su dedo contra los labios de Yoongi.

—Por favor, déjame terminar. Sé que ambos estuvimos de acuerdo en esto, y estoy bien con eso. De hecho lo prefiero de esa manera. No puedo pensar en nada que quiera más que pertenecerte. Quiero estar contigo y todo lo que eso implica. Ni siquiera pienses lo contrario. No estaría aquí si no fuera de esa forma.

Un nudo se formó en la garganta de Yoongi ante las palabras de Jimin. No importa lo que los demás piensen, un sumiso no puede ser un real sumiso a menos que ellos quieran. Eso solo funciona de esa manera. Si alguien piensa diferente, ellos no saben lo que significa ser un real sumiso.

DOMINACIÓN Y SUMISIÓN. ➸yoonminWhere stories live. Discover now