Capítulo 15

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Jimin tarareaba suavemente mientras preparaba el desayuno de Yoongi. Con algo de suerte, lo terminaría antes de que él despertara. Quería sorprenderlo con el desayuno en la cama antes de que sus huéspedes despertaran.

Ellos no habían visto a sus amigos el resto de la noche pero seguramente los habían oído. Jimin estaba seguro de que Jungkook no podría sentarse cómodamente en un tiempo. Y él no creía que este pudiera quejarse.

Escuchar a Jungkook y Taehyung a través de la pared de la habitación, había sido tan excitante como el infierno. El sonido de los hombres en la intimidad, había definitivamente agregado algo a la noche de hacer el amor de ambas parejas. Yoongi había estado excepcionalmente vigoroso.

Jimin creía que su amante tenía algo de exhibicionista-flagelador-voyeurista en él. Si él consideraba la vez en que Taehyung los había visto, además de anoche, en ambas ocasiones Yoongi casi había perdido el control, tan apasionadamente agresivo, eso, bueno, le hacía preguntarse si necesitaba reconsiderar ser el bebé público de su señor.

Solo podría imaginar lo excitado que Yoongi podría estar si ellos fueran juntos a Kim’s Dungeon. Podría usar un collar y quizás una correa y sentarse a sus pies. Estaba muy seguro que él lo apreciaría mucho.

Se rió. Sí, parecía un poco extraño que eso fuera ahora la base de su vida. Terminó de colocar la fruta en un plato y dejó el plato en una bandeja. Levantó la bandeja, se dirigió hacia la habitación. Se oyó el timbre de la puerta antes de que llegara al pasillo.

Jimin vio la comida y entonces la puerta. Dejó la bandeja en el mostrador y fue a abrir la puerta. Todo el aire de sus pulmones salió en un profundo jadeo cuando vio a su padre parado en el marco de la puerta.

—Jimin.

—Padre.

—¿Me vas a dejar entrar? —su padre preguntó señalando a la puerta que él sostenía con un fuerte agarre.

Jimin se apartó.

—Por favor, entra.

—Bueno, al menos no has perdido tus modales, incluso si perdiste tu cabeza.

Jimin tranquilamente gruñó. Parecía que su padre aún tenía malos sentimientos hacia él. Entonces, ¿por qué estaba aquí? Park Hyungsik había dejado sus sentimientos sobre tener un hijo gay más que claro antes de desheredarlo y echarlo a la calle, hace casi dos años.

—¿Por qué estás aquí, padre?

Hyungsik se giró revisando el cuarto viendo sobre su hijo.

—Han sido dos años, Jimin. Creo que es suficiente tiempo para juegos y para que lograras sacar lo que fuera de tu sistema. Es tiempo de regresar a casa y tomar tus responsabilidades.

—¿Sacar de mi sistema? —preguntó.

—Eso... esa cosa —Hyungsik dijo, moviendo su mano en el aire—. Esa cosa con otros hombres. Es tiempo para que te detengas, hijo.

—¿Esa cosa con otros hombres? —Jimin dijo molesto—. ¿Quieres decir el ser gay?

—Tú no eres gay, Jimin. Estás confundido. Si solo vienes a casa donde perteneces, estoy seguro de que podrás ver las cosas correctamente.

—¿No soy gay? —se rió amargamente—. Bueno, considerando que tenía el pene de mi novio en mi culo anoche, diría que estás equivocado.

El dorso de la mano de Hyungsik golpeó tan duro la cara de Jimin que le zumbaron los oídos.

—Ni siquiera quiero oírte hablar de esa forma de nuevo. Ahora, toma tus pertenencias, Jimin. Vienes a casa conmigo y vas a olvidar toda esta insensatez.

DOMINACIÓN Y SUMISIÓN. ➸yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora