EL EMPRESARIO

CAPÍTULO 89. EXTRA 7 LA VIDA DIARIA DE LOS CACHORROS TERRESTRES (7)

De acuerdo con la descripción de los niños hombres bestia de la mente de Aojia y la simple comprensión del cuidado de niños de Rong Mingshi, los dos compraron muchos artículos y el empleado de la tienda les dio un cochecito especial para gemelos.

La hermana guía de compras estaba muy feliz de atender a los dos hombres guapos. Ella les dijo con entusiasmo muchas cosas de sentido común sobre el cuidado de los niños. Después de ver que los dos chicos guapos la escuchaban seriamente, la hermana guía de compras estaba muy feliz. Era raro que los hombres apuestos cuidaran a sus hijos con tanta cautela.

Los había visto comprar cosas con sus esposas e hijos, pero rara vez veía a hombres comprando solos. En particular, el hombre con una altura extraordinaria y una atmósfera poderosa obviamente era un fanático de los militares, pero llevaba una mochila militar con dos muñecos. El contraste era infinitamente lindo. Los dos muñecos parecían ser las personalizadas de alta gama. Eran realistas y sus ojos se movían, lo que permitía a una persona ver su espíritu. Si no fuera por el impulso de este hombre, la hermana guía de compras realmente quería ver más de cerca.

Durante este tiempo, los dos niños que sujetaban los bordes de la mochila se portaron muy bien. Aparte de los ojos que se movían y miraban todo a su alrededor, las pequeñas garras/patas que sostenían la mochila eran extremadamente estables, sin moverse en absoluto.

Sin embargo, cuando pasaron por el área de juguetes, los dos niños en la mochila no pudieron contenerse y se movieron. El pequeño leopardo de fuego movía principalmente las orejas, pero el dragón de hielo abanicó sus alas y casi salió volando de la mochila.

Los ojos de Rong Mingshi fueron rápidos cuando tocó las pequeñas cabezas y las volvió a colocar dentro de la mochila. El centro comercial estaba lleno de gente y podía haber vigilancia en cualquier rincón. Si se mudaran, los niños solo podrían ser metidos en la mochila.

El pequeño leopardo de fuego que solo movió las orejas de mala gana gritó. Se sintió un poco agraviado. Aún así, Rong Mingshi insistió en presionar la mochila mientras le preguntaba a Aojia: "¿Qué tan transpirable es la mochila?"

"Es ajustable". Después de decir esto, Aojia se movió para ajustarlo. Rong Mingshi pudo cerrar la mochila de manera tranquila.

Los dos niños pequeños en la mochila dejaron escapar gemidos ofendidos, lanzando fuego y hielo, pero esta era la última mochila militar y su pequeño poder de ataque no la dañó en absoluto. Los dos niños traviesos vieron que esto tenía poco efecto y arañaron la mochila de manera enojada. Pasó algún tiempo antes de que se hicieran obedientes.

Las dos personas empujaron el auto para pagar. La computadora cuántica de Aojia en su muñeca simuló el teléfono móvil de este planeta y se pagó el monto total. Exploraron el área y vieron una tienda de oro en el centro comercial.

Aojia levantó las cejas y empujó el carrito directamente hacia él. Rong Mingshi miró el letrero en el mostrador. Una comisura de su boca se movió mientras empujaba un carrito para seguirlo.

Anteriormente, Aojia compró adornos de oro en Internet, pero al principio su dinero no era suficiente y solo compró un pequeño lingote de oro. La textura no era lo suficientemente pura para apaciguar al pequeño dragón de hielo. Ahora Aojia tenía suficiente dinero disponible.

Rong Mingshi miró los diversos adornos dorados que irradiaban un brillo dorado bajo la luz y se volvió hacia Aojia. "¿Qué quieres comprar?"

Rong Mingshi usó el lenguaje de los hombres bestia, por lo que Aojia respondió de la misma manera. "Todo."

Esta respuesta fue bastante autoritaria.

Rong Mingshi, "..."

Aojia explicó: "Una cama de oro puro ayuda al crecimiento de los hombres bestia dragón".