Luna

Capítulo 18: Dentro de la gargola.

Todo era blanco y frío, pero tranquilo al fin. No sentía nada de la rabia que la había acompañado todo el tiempo. A su alrededor no había nada, hasta que de repente si lo hubo.
Sus padres estaban con ella. Su madre la abrazó con fuerza y le besó en la cabeza.

- Mi pequeña, lo siento tanto. Te dije que sería la última vez que nos veríamos pero no podía dejarte sola, no aquí, no así. Pero has hecho algo bueno. Ya no estamos solas, tu padre ha regresado después de tanto tiempo y vuelve a ser el mismo- Se apartó lo justo para mirarle a los ojos- Haz de saber que aun puedes volver, esfuérzate, lucha y recupérate. Nos volveremos a ver hija mía y estaremos los tres juntos para siempre.

Con un último beso volvió al lado de Oliver. El la recibió entre sus brazos y una sonrisa le llegó a los ojos. Cuando miró a su hija sólo pudo disculparse.

- Lo siento Luna, nunca quise herirte de esta forma pero no era yo, o no en parte. Lo siento.
- Lo entiendo y te perdono, ojalá tú puedas hacer lo mismo.
- No hay nada que perdonar, hiciste lo que debías hacer. Te queremos cariño.
- Yo también os quiero.

Detrás de ella alguien tosió.

- Vaya, parece que llego a tiempo al momento tierno.

Al girarse lo vio, corrió hacia él y se fundieron en un abrazo.

- Gracias por haberme hecho tan feliz mi pequeña.
El ligero roce de un beso en su mejilla fue la despedida más agridulce de todas. Al mirarle solo sentía amor y gratitud. Verle reunirse con Sandra y Oliver, la hizo sonreír.
Llegó a susurrar un "Te voy a echar mucho de menos Tío Eme" y luego, la soledad volvió a ser su única compañía.
No sabía si podría perdonarse todo lo que había hecho.