Darren desvio sus ojos del horizonte y tratando de dejar las palabras al viento intento buscar algo a lo alejado del lado derecho de la playa, por allá dónde los lancheros y surfistas tan solo movían las manos.
--- ¿Y si solo lo dejo pasar? --- pregunto el menor con la miara perdida en la arena, las piernas recogidas y los brazos sobre las rodillas.
--- ¿Estas loco? Esperaste y pusiste demasiado empeño en esto, inclusive dejaste de ser ese maldito asocial y saliste a la luz. Fuiste otra persona por querer ser amado, Sebastián ¿Y ahora quieres dejarlo? --- Darren estaba molesto, se le notaba en todos los aspectos. Inclusive la sangre le ardía al igual que el cuerpo.
No solo Sebastián se había visto afectado por aquel amor, Darren también había sido desechado de apoco de la amistad que tenía con el peli negro. El quería que Sebastián avanzara por su cuenta y se propuso retirarse un poco de su lado para que el más mayor actuara a su favor. No culpaba a Ryan de lo sucedido, le alegraba que al menos hiciera que Sebas viene las cosas en las que es bueno. Pero, sus puños sí querían golpear su cara.
--- A veces es mejor dejar pasar las cosas y hacer como si nada hubiera sucedido. Dejar ir es parte del amor.
--- Y ser cobarde y huir, no.
Sebas le miro con el ceño fruncido, aquel le daba el perfil. El cabello del mayor se movía mientras la brisa corría trayendo aquellas promesas, que el mayor le juró y el mar se llevó en forma de espuma.
Darren le miró, sonrió levemente, suavizó la vista y los tenues rayos del sol golpearon su rostro.
El cabello alborotado de Sebastian, las cejas despeinada y gruesas, sus labios rosados y con algunas heridas por que al menor le gustaba morderse cada que estaba nervioso; las pestañas bien amontonadas y caídas, su piel suave y tersa, brillante y carente de imperfecciones, solo un rubor.
Mientras más veía Darren, tal vez más se arrepentía de nunca haber hablado primero.
Pero, muy en el fondo sabía que estar enamorado de alguien que nunca lo estaría de él, le quemaría hasta el Alma cuando le partieran el corazón a su amor.
El quería y deseaba que Ryan le buscara a su amigo. El castaño era bueno, pero sus amigos le alejaban. Porque ya sospechaban de una relación con el peli negro y para persuadir, Ryan optó por alejarse. Darren lo sabía.
Ryan se lo dijo.
Por eso, Darren no dejaría que Sebastián se rindiera. Lo haría que luchara por lo que quería. No lo dejaría ver como también perdía.
--- Tu no, estupido --- solto una risita y desvio la mirada.
Sentiá el nudo apretando su garganta. Los ojos arder. La vista nublarse. Y el sol quemaba con más intensidad mientras se ocultaba.
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Esto ya va ir finalizando. Necesito hacer otros, pero si los hago al mismo tiempo me perderé entre tanta letra.
