ᴇʟ ʜᴏᴍʙʀᴇ ᴅᴇʟ ꜱᴀᴄᴏ

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𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑰𝒗á𝒏

Nos encontrábamos Marcos, Roque y yo en nuestra habitación. Yo acababa de entrar a esta con una sola toalla rodeándome por la cintura.

Fui a dejar la ropa en la cama y me giré ya que Roque me estaba hablando.

Roque: A ver si le dices a Julia que se corte las uñas, ¿eh?

Me di la vuelta para mirarle y después intentar ver mi espalda.

Iván: No flipes, anda. Creo que me lo hice en los pasadizos. -dije riéndome-

Roque: Joder, que acojone, tío. Si no llega a ser por Marcos...

Nos giramos ambos en dirección para ver a Marcos pero este estaba como buscando algo por toda la habitación.

Iván: ¿Tú qué? Estamos aquí echándote flores y tú ni te inmutas.

Marcos: ¿Nadie ha visto mi móvil?

Ambos hicimos una mueca como diciendo que no teníamos ni idea.

Marcos: Joder..

Iván: Eh, eh... Que nos salvaste el culo, tío -dije poniendo mis manos en su cara- Gracias.

Marcos: ¿Gracias..? ¿Cómo que gracias? -dijo riéndose- No, no, no, me debéis una y lo menos que podéis hacer es pasarme el trabajo de física.

Iván: ¿Eh? -dije ofendido- Prefiero deberte la vida.

Roque: Mira, aquí está tu móvil, chaval. Ya no te debo nada. -dijo dándomelo- Tienes tres llamadas perdidas.

Marcos cogió su móvil, el cuál había encontrado Roque. Se puso a ver sus llamadas perdidas, sé quedó paralizado.

Marcos: No puede ser... No puede ser -dijo girándose para verme-

Iván: ¿Qué pasa? -dije preocupado-

Marcos: Qué me ha llamado mi padre

Iván: ¿Cómo?

Marcos nos enseñó el teléfono y efectivamente tenía las tres llamadas perdidas de su padre.

Iván: Llama. Llama, coño, llama.

Marcos se puso a llamar al teléfono pero sonaba como que cortaba, a la segunda, le salía como que estaba apagado.

Marcos: Está apagado

𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑳𝒊𝒂

Nos encontrábamos todos sentados en la mesa desayunando hablando de nuestras cosas hasta que Marcos cambio de tema.

Marcos: En el móvil tengo tres llamadas perdidas de mi padre, llamo y llamo y no contesta nadie. No entiendo nada.

Carol: Marcos, a lo mejor no es él.

Lia: Y si no es él, ¿quién podría tener su móvil? Todo esto es muy raro.

Carol: Pues una banda de nazis locos. Yo que sé, nada de esto tiene sentido.

Iván: A lo mejorlo habían secuestrado como a tu madre, y ha conseguido escapar.

Roque: ¿Y por qué ahora no coge el teléfono? ¿Le han vuelto a pillar? -dijo mirando a Iván- No sé Marcos.

Julia: A lo mejor ella sabe algo.

Todos nos giramos hacía la dirección que estaba mirando Julia y pues como pensaba, miraba a Amelia.

De repente la misma chica que se le acercó en el desayuno a Iván, se volvió a acercar.

Estaba vez le había dejado una nota en el bolsillo del pantalón de Iván y este se dió cuenta.

¿Me amas? - El Internado Laguna Negra. Iván Noiret Where stories live. Discover now