VII: Toque de midas

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AUTOR: kickassidy (Ao3)

(En este fanfic, la droga que consume Wolfwood tiene por nombre "Lágrimas de Michael").

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A pesar de toda su terquedad, comportamientos estúpidos y desinteresados, es fácil para Wolfwood olvidar que Vash no es exactamente humano. Este hecho lo mira directamente a la cara con una sonrisa suave y triste.

Ha visto sus marcas antes, ha pasado suficiente tiempo junto a Vash para saber la verdad, las señales reveladoras de algo que está al borde de la humanidad. Y joder , es un desastre para él.

Unos ojos azules demasiado claros se clavan en los suyos y está arruinado. Su piel, que se cura casi demasiado rápido, se suaviza contra la suya una y otra vez, dejándolo sin palabras. Este “hombre” horriblemente gentil, este inhumano con más humanidad de la que jamás hubiera creído posible, ha detenido su vida. Él no lo tendría de otra manera. Hay una curación en ello, piensa. En la forma en que le duele el corazón , completamente destrozado de una manera que ni siquiera las Lágrimas de Michael podrían reparar. 

Pero Vash, puede. 

Y lo hace, lava sus bordes andrajosos, sosegandolo y salvándolo; mejor que cualquier droga que pudiera tomar. No es que pudiera admitir eso en ningún otro lugar excepto en los tranquilos confines de su habitación.

— Eres hermoso, Spikey, espero que lo sepas — murmura, pasando su pulgar por su pómulo estampado, ganándose un suave “mmm” del otro hombre agotado. 

Se acostaron cara a cara en la cama juntos en una habitación de motel lúgubre en medio de Dios sabe dónde, bebiendo en la noche pacífica, una rareza en sus vidas. El exterior estaba blanqueado por el sol roto y las habitaciones, sinceramente, no eran mucho mejores, pero independientemente, por lo general no pueden tener noches como esta para ellos solos. No sin la continua amenaza de disparos. No es raro que tengan que salir corriendo de la ciudad en medio de la noche para consternación de Vash. Es difícil para él tratar de vivir entre humanos cuando hay una recompensa de $$6,000,000 por su cabeza. Pero esta noche, los vientos afuera son bajos y el aire cálido del desierto está inundado con el zumbido de las alas de los gusanos, están juntos. 

— Nico… — susurra Vash a cambio. Cierra los ojos y simplemente respira, las pestañas leonadas revolotean justo por encima del puente de la nariz.

Se está haciendo tarde, después de todo, pero puede ver que ninguno de los dos desea que este breve momento de felicidad termine todavía. Sin embargo, lo que no puede ver es el tenue brillo que emana de las marcas en su piel, filtrando luz hacia donde se juntan sus pieles, los patrones simétricos brillan suavemente en la tenue luz de su habitación. Su mano de carne se posó sobre la bronceada que rozaba su rostro, y contento, sus ojos se abrieron una vez más, se encontraron con su propia luz suave. 

Wolfwood observa cómo Vash, extasiado, se pasa los dedos por los brazos, dejando pequeños zarcillos de un suave brillo verde azulado. Suben rápidamente por su bíceps, como enredaderas, siguiendo sus dedos y desapareciendo cuando Vash levanta la mano de nuevo. Siempre algo nuevo con este chico, piensa Wolfwood, divertido. Espera que se disculpe, pero Vash vuelve a entrar, arrastrando su mano brillante por su pecho desnudo, hipnotizado, sus ojos llorosos reflejan la luz. 

— ¿Ha sucedido esto antes, Tongari? — pregunta, cautivado por la vista frente a él.

— No en mucho tiempo, no — se ríe su ángel, finalmente atreviéndose a mirarlo de nuevo, su cara bonita adornada con su característica sonrisa tonta.

Hay plumas de alfiler brotando a lo largo de la línea de su cabello, rogando ser acariciadas, la mano brillante que ha presionado a lo largo de su cintura se vuelve cada vez más brillante. Él puede decir que la intimidad lo está afectando.

✖ Fics collection (VashWood) ❌Where stories live. Discover now