✖ Fics collection (VashWood) ❌

XVI: Sacramento

AUTOR: silentsaint (Ao3)

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Los arreglos para dormir funcionan así: Meryl se tiende en el asiento trasero, el derecho divino del conductor y también la más pequeña entre ellos. Roberto golpea la palanca chirriante para reclinar el asiento del pasajero y, por lo general, se queda dormido en cuestión de minutos a pesar del ángulo extraño. 

En las noches despejadas, que es la mayoría de las noches en la Tierra de Nadie, Vash toma el techo del auto. Wolfwood personalmente pondría buenos dólares dobles en un tonto como él que puede dormir en cualquier superficie remotamente horizontal, y posiblemente también en algunas verticales. 

No es que haya estado prestando atención, ni nada. Es simplemente el odio natural de Vash lo que hace que se dé cuenta. 

El propio Wolfwood hace la primera guardia, siendo un ave nocturna natural, y acompañado de uno de sus dos sacos de dormir para cuando haya terminado. Siempre se estacionan un poco lejos de donde establecieron su pequeño campamento, lo suficiente para darle la ilusión de privacidad sin dejar de estar al alcance del oído del vehículo. Es bueno tener un momento para fumar tranquilamente, a diferencia de los cigarrillos estresantes y acosados ​​que tiene la mayor parte del tiempo con esta gente.

Vash siempre se ofrece como voluntario para la segunda guardia, la más inconveniente, y normalmente se "olvida" de despertar a Roberto para su turno (Meryl está exenta, debido al estado de conductor antes mencionado). Siempre se ríe por la mañana con su risa tonta patentada y un airoso "¡Me voy a dormir la siesta en el auto!" mientras los ojos agudos de Roberto se estrechan y Meryl le da una palmada en el hombro y le dice que descanse.

Wolfwood no puede soportarlo, personalmente. 

No por ningún cuidado real por la salud de Vash, no es su problema si el idiota se desploma por agotamiento mientras esté vivo. Pero por lo convincente que es, lo bien practicados que están la sonrisa tranquilizadora y el cambio alegre de temas. Mientras Vash se ría lo suficientemente fuerte y haga el ridículo, nadie lo recordará haciendo una muy buena imitación de Atlas levantando silenciosamente el peso del mundo sobre sus hombros. 

Casi se sorprende a sí mismo creyéndose a veces, que es la peor parte. Ha visto demasiada mierda para seguir siendo tan crédulo , ni siquiera para los rubios con bocas perfectamente curvadas y pestañas largas que distraen la atención. 

Sufrir por el bien de otra persona y no esperar nada a cambio no es natural. Es intrínsecamente inhumano. Ninguna cantidad de carisma improbable o galimatías pacifista puede disfrazar eso. 

Vash es un mal actor, uno que ni siquiera puede mentir lo suficiente como para presentar algún tipo de espectáculo convincente. Todo el camino hasta que ya no lo es, y de repente él es el papel principal, interpretando al bufón que se olvidó de comer su propia cena, y todos se ríen y siguen adelante. 

“No soporto a la gente como tú”, quiere decirle Wolfwood. “Gente que trata de asumir la carga de cada pobre bastardo a su alrededor, y cree que aún puede mantenerse erguido.”

Nunca lo hace, no está tan aburrido como para comenzar discusiones sobre moralidad sociológica sólo por diversión (especialmente en un viaje en automóvil estrecho), pero a las palabras le gusta flotar en su garganta de todos modos. 

Están flotando en su garganta ahora, viendo a Vash fingir dormir en el techo del auto. Su respiración es un poco demasiado tranquila para eso, las piernas abiertas un poco demasiado rígidas. Tal vez esté meditando o algo así. 

Sea lo que sea, no es asunto de Wolfwood. Vuelve a mirar el vago término medio entre la fogata y la línea del horizonte, y desea distraídamente que haya algo más fuerte para beber que el agua rancia.