Luz y Oscuridad

7

-¿No quieres quedarte a descansar?- insistí frente al trabajo de Becca.

La había traído con el auto porque me lo había pedido, pero en verdad me parecía una locura venir a trabajar después de la noche que habíamos pasado.

Sin embargo, entendía que debía cumplir con sus obligaciones. Yo también, y por ello iría a la universidad.  

-No puedo, John me va a descontar el día si lo hago- masculló.

-Es un maldito idiota- Lo odiabamos.

-Sin dudas, pero es el que me paga así que debo soportarlo- se encogió de hombros -Más tarde te llamo, te quiero mucho- agregó y con un fuerte abrazo nos despedimos.

Bajó del auto y caminó despacio. Me aseguré de que entrara a la cafetería y luego aceleré.

Ahora era mi turno de afrontar el día. 

Estuve todas las horas rezando para no cruzarme con Nick, y por fortuna Dios me oyó. 

No sabía ni qué le diría ni cómo reaccionaría. Estaba enojada pero asustada.

Entendía que yo también estaba en peligro.

Entonces, ¿Lo insultaría? ¿Lo abrazaría? 

El resto del día transcurrió sin más noticias. Y a pesar de que Nick me había mandado un par de mensajes pidiendo que habláramos, no le había respondido. 

Apenas sabía lo que estaba pasando, pero no estaba segura de querer saber completamente donde nos habíamos metido.

Para la hora de la cena, me senté en el sillón con un plato de fideos y encendí el televisor. 

Di un mordisco y bufé. No estaban ni por asomo tan ricos como los de Nick.

Joder, lo detestaba.

Y entonces, como si supiera que estaba pensando en él, mi teléfono comenzó a sonar.

Vi su nombre en la pantalla y suspiré. No se iba a rendir hasta hablar conmigo.

Con decisión, acepté su llamado.

-¿Qué quieres?- dije borde.

-Chiara, al fin- escuché su dulce voz del otro lado y mi corazón se aceleró. Maldito traidor.

-No quiero hablar- respondí.

-Déjame explicarte… Por favor-

-Ayer te lo pedí miles de veces y solo te quedaste en silencio- le recriminé y el silencio invadió la llamada.

Touché.

-Lo siento- dijo con voz suave -En verdad lo siento. Tal vez podamos juntarnos y hablar de esto-

Definitivamente Nick no se rendiría conmigo, y muy a mi pesar, eso me gustaba.

Las imágenes de Becca temblando me volvieron a la realidad.

-No quiero volver a verte Nick, esto es demasiado para mí - me sinceré.

-Lo entiendo, pero… Ya no pueden mantenerse al margen de la situación.- dijo y suspiró.

-¿De qué estás hablando?- balbuceé asustada.

Mierda mierda mierda. Mis sospechas se confirmaban. 

-Mira Chiara, quiero serte honesto. No estás segura. - mi pulso se aceleró - Quiero protegerte, voy a encontrar la forma de hacerlo. Y Salvador hará lo mismo con Becca-