.Suele Suceder.

23*Una Esperanza*

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Caminaba de un lado a otro, desesperado, angustiado, nervioso, poniendo de los nervios a los demás, esos que estaban a nada de amarrarlo a una silla para así poder esperar en paz.

El menor se había sentido algo mal durante la tarde de su semana 38, por lo que Prem le había pedido asistir a su consulta para un chequeo, siendo su madre quien le acompañara, ya que Yoongi estaba cumpliendo con un pedido en su estudio en Hibe, llegando unos minutos más tarde, y si bien pidió entrar Prem no se lo permitió.

Es que Jimin ya estaba nervioso, sabía de sobra que si veía a Yoongi comerse las uñas se pondría peor.

-Yoongi maldita sea te puedes quedar quieto!!-rabio Jin, mirando al peli negro que ya tenía casi un hoyo en el suelo de tanto paseo.

-Por qué Prem no sale a decir que pasa...-

-Porque es quien tiene que revisar a Jimin, por eso- rodó los ojos Tae- ya Hyung nos pone peor verlo así, solo cálmate un poco y verá que alguien sale y le dice que pasa- suspiro y miro el lugar vacío entre el grupo.

-Solo quiero saber si están bien-

-Lo sabemos Hyung, todos queremos- apoyo Kook.

Pasaron al menos unos 20 minutos, para que la puerta se abriera dejando a ver Prem, se levantó rápido y se le fue encima.

-Como esta Jiminie, puedo verlo!?- el mayor movió la cabeza, se esperaba eso del novio de su paciente, no pasó mucho para que todos los demás incluyendo los padres de Jimin estuvieran rodeándolo.

-A ver primero cálmate- lo miró fijo - segundo, necesito que sigas a la enfermera y hagas todo lo que te pide- lo vio asentir- entendiste eso verdad?-

-Sí, si claro y después puedo verlo- Prem respiro profundo.

-Cuando estés listo verás a tu hijo llegar al mundo Min así que por favor no te...- pasó de blanco a pálido casi muerto, siendo agarrado por Tae Y Jungkook, si no se habría ido de cara al suelo- hey, te necesito entero Min no madreado-

-Como que, es que acaso él, ellos ya...- balbuceaba.

-Si Min, tu hijo quiere salir, así que por favor sigue a la enfermera, ella te ayudará a cambiarte para que estés en el parto de tu hijo- nuevamente las piernas aparecieron no poder sostenerlo.

-Hyung!-

-Agárrate Hyung, vamos, al fin llegó el momento de conocer al bebe, no te puedes desmayar ahora-

-¿Está en labor de parto?- preguntó la mujer a lo que Prem asintió- mi pequeño, debe sentir mucha molestia-

-Tranquila está haciéndolo muy bien-

-Ya oíste Hyung, Jiminie te necesita, así que ya deja el show y ve!- Tanto Kook como Tae y Hobi lo empujaron hasta llegar junto a la chica que solo sonreía, era normal esa reacción en los padres primerizos.

-Por favor que alguien guarde sus cosas de valor, celular, reloj, billetera, cadena, aretes, pulseras, anillos...- a medida que la chica le nombraba Yoongi se quitaba las cosas entregándolas a los chicos- muy bien ahora síganme-

-Suerte Hyung, dale ánimos a Jiminie!-

-¡No te desmayes Yoongi!-

-Y no vomites!- todos miraron a Jungkook- ¡que!? Leí que ahí hombres que vomitan en estos casos...-

-No te cagues Min!- grito Jin, haciendo a todos mirarlos, incluso los padres de Jimin- saben que le corre el estómago cuando se pone nervioso-

-Verdad-

-Tienes razón-

-Había olvidado eso-

Lo guiaron por un pasillo hasta una salita donde había muchas cosas que parecían plásticas.

-Por favor colóquese esto y luego lave sus manos- se colocó la pechera, los cubre zapatos, el gorro, y lavó muy cuidadosamente sus manos- vamos, el papito está por aquí- caminaron por otro pasillo hasta otra salita un poco más grande donde había una camilla además de muchos monitores, una cuna especial, y ahí en el centro su menor respirando rápido, pero pausado, así como Prem le había enseñado.

-Jiminie!- en cuanto escuchó aquella voz, sonrió, buscándolo con la mirada- amor, cómo estás?-

-Bien, solo me molesta un poco...- estaba sudoroso, y rojo- ya quiere salir-

-Si, no pudo esperar un poco más- iba a sonreír, pero la contracción lo azotó con furia, el bebe quería salir y estaba haciendo todo lo posible por hacerlo notar.

-Jiminie respira- sintió el agarre en su mano y dolió la fuerza que el menor ponía aguantando la contracción, su pareja estaba sufriendo- bebe no hagas sufrir a tu papá- susurró cerca del vientre ese que se movía por momentos.

-Bien, ya estamos todos!- grito Prem, llamando la atención de los demás- ese bebe ya no quiere estar allí, así que tenemos que ayudarlo a salir- los ayudantes asintieron- Min ponte a un lado y toma su mano- asintió - Jimin, escucha, quiero que a partir de ahora pujes como si quisieras hacer del baño, y no pudieras, oíste?-

-Pero y si...-

-Si algo sale tranquilo, es parte del proceso, lo importante es que cuando sientas la contracción pujes- asintió - posiblemente sentirás dolor, ya que tu cuerpo no está hecho para esto, pero sé que podrás- lo, amino.

-Sí, sí -

-Bien, ahora puja suave, pequeño- respiro profundo y comenzó con la fuerza, sintiendo como todo en su interior se movía y acomodaba para darle la salida a ese pequeño ser.

-Bien sigue así, así...- contó hasta 10 - ahora descansa, respira y cuando sientas las ganas pujas ok?-

-Vamos amor, lo haces muy bien- cerró los ojos y concentró su atención en su cuerpo esperando que este le diera la señal, contó hasta 15 cuando lo sintió, nuevamente esa fuerza presionando su parte baja volviendo a la tarea.

Pujaba con todas sus fuerzas, se sentía ansioso, al fin podría ver a su pequeño, podría abrazarlo y darle todo ese amor que no pudo darle a su pollito, fue entonces que su mente le trajo la imagen de aquel ser, ese con la sonrisa más hermosa que él haya visto, dándole el ánimo de seguir, apretó la mano de Yoongi y dejó salir todo, el dolor, la pena, la rabia, todo salió con ese pujo.

Hasta que a sus oídos llegó aquel sonido que marcaba el comienzo de su nueva vida, esa que prometía la más plena felicidad.

-Señor, agárrese, no se va a lastimar- mirando a Yoongi.

Jimin los abrió lento y miro frente a él, como una gran sonrisa,  también lloraba.

-Min, ya tampoco exageres...-

Cuando los ojos del menor chocaron con los de Prem sintió la vida volver a su cuerpo, lo levanto lento, mostrándole al fin el rostro de su hermosa creación.

-Les presento a su bebe arcoíris chicos- dijo alegre - es una hermosa niña-

Suele suceder que cuando la vida te cierra una puerta, la esperanza te abre una ventana.

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