Love the Darkness

Capítulo 2

Hailey

El verano pasa volando y, antes de darme cuenta, faltan dos semanas para volver a Hogwarts. Equilibraba mi tiempo entre mis seguidores, la Muerte y una reunión semanal con Tom. Aprendí pronto que odiaba que lo llamaran Tom, así que ahora me divertía llamarlo así sólo para molestarlo. Me aseguraba de referirme siempre a él como el señor oscuro delante de los demás. Molestarle era una cosa, pero me negaba a faltarle al respeto. La Muerte me guió por el bosque en busca de un alma que necesitaba ser tratada. Aún me faltaban unos años para poder reclamar mi título de Señora de la Muerte, pero eso no me importaba. En el futuro me será útil aprender a lidiar con las criaturas oscuras de este mundo. Un sonido sordo me hace girarme. Veo a un chico algo más joven que yo acurrucado bajo un árbol. Miro a la Muerte y él asiente. Me acerco con cuidado. Me mira y sus ojos se abren de par en par.

"No, por favor, aléjate. No quiero hacerte daño".

"No me harás daño" Digo manteniendo la voz baja para ayudar a calmarlo.

"Lo haré, soy un monstruo". Me detengo a unos metros de él y me agacho para estar a su altura. Suspiro cuando veo el mordisco en su brazo.

"No creo que seas un monstruo".

"Sí que lo soy. No puedo controlarlo". Me siento en el suelo. Cosas como esta me hacían odiar aún más a Dumbledore y a sus seguidores. Este niño nunca recibiría la ayuda que necesitaba porque ahora lo etiquetaban como una criatura oscura. No más que suciedad en la suela de sus zapatos a sus ojos. Miro a la Muerte.

Tenemos que ayudarle.

Sí, ama.

Encontramos un lugar para que el niño se quedara, pero sabía que necesitaba más. Necesitaría una manada, pero por ahora, estaba a salvo.

Hoy había convencido a la madre de Ginny para que nos permitiera salir, bueno ella pensaba que estábamos con mi tutor pero lo que no sabía no la mataría. Teníamos una reunión con algunos de los otros miembros en unos minutos pero antes, decidimos tomar unos dulces. Ginny echa a correr cuando me burlo de ella por un enamoramiento que tiene y me río siguiéndola. Observo como se topa con un chico e inmediatamente tiro de ella hacia mí. Sabía lo que Malfoy le haría si tuviera la opción.

"Ha sido un accidente Malfoy, déjala en paz" Digo agarrando mi varita. No quería enemistarme con el ahijado de mi socio, pero no permitiría que le hiciera daño.

"Dile a tu pequeña trai...." Apunto mi voluntad a su cuello y siento que mi poder me envuelve.

"Termina esa frase, te reto". Le desafío. Siento una varita contra mi cuello y miro al chico que está a nuestro lado. Sus ojos fríos y oscuros me recuerdan a alguien, pero no consigo identificarlo.

"Draco no le hará daño a tu amiga, pero tienes que liberarlo". Asiento y bajo la varita mientras él hace lo mismo.

"Soy Hailey Rose."

"Mattheo" Enarco una ceja pero él se encoge de hombros extendiendo la mano. Agarro su mano e instantáneamente siento que se forma un lazo, bandas doradas envuelven nuestras manos. Me quedo hipnotizada, la magia parece estar alcanzando también a Draco y Mattheo agarra su mano y la coloca encima de la nuestra. El vínculo se forma sobre nuestras manos y se solidifica antes de fundirse en nosotros. Mattheo finalmente me suelta y me giro hacia Ginny que nos mira con los ojos muy abiertos.

"Informa a los demás de que no podré asistir a la reunión, pero quiero informes completos cuando subamos al tren".

"¿Puedo decírselo a los demás?" Me lo pienso un momento, pero me niego a mantener a mis almas gemelas en secreto.