Love the Darkness

Capítulo 14

Hailey

Me encuentro sola en el tren repasando los planes de última hora. Los chicos estaban con Logan en el compartimento de al lado por si pasaba algo, pero yo necesitaba un momento para mí. Mañana haría el ritual para unir a la Muerte a mí. Me advirtió que habría cambios, pero no sabía cuáles serían. Después de eso, tenía una semana antes de que llegaran todos. Neville conocería a Bellatrix por primera vez y estaba nervioso. Me dijo que quería escuchar su versión de lo sucedido, pero aún así me preocupaba que le resultara demasiado pesado. Tampoco podía decir que lo culpaba. Hice a un lado esos pensamientos. De todas formas, ahora mismo no podía hacer mucho al respecto.

Llegamos a la mansión y Logan me agarra de la mano mientras entramos. Les había pedido a todos que nos dieran tiempo para hablar con él antes de que conociera a todo el mundo. Habíamos decidido decírselo al llegar a casa por si se asustaba. Tom llegaría mañana después de que consiguiera que los chicos se quedaran instalados. El profesor Flitwick iba a hacer la primera guardia. Llevamos a Logan escaleras arriba y le enseñamos su habitación. Me río entre dientes de su emoción. Narcissa se había pasado. Sus paredes eran plateadas con detalles verdes de Slytherin. Lo acerco a la cama y me siento. Miro a mis compañeros, que me dan un gesto de ánimo.

"Logan hay algunas cosas que no pudimos explicarte en la escuela. Tenemos aquí a ciertas personas que están deseando conocerte, pero tengo que explicarte por qué no puedes decirle a nadie más que están aquí". Me mira confuso, pero asiente. Le explico todo e intento responder a todas las preguntas que puedo. Logan parece tomárselo bien pero está nervioso por conocer a los habitantes de la casa.

Draco

Una vez que Hailey le explica todo, lo toma de la mano y lo conduce fuera de la habitación, llamando a un elfo para avisar a la familia que estaba listo para reunirse con ellos. Entramos en el salón formal y veo a mi madre hablando con Bellatrix. Las dos mujeres ven a Logan y me río mientras él se esconde un poco detrás de Hailey. El chico listo sabía que las mujeres eran más peligrosas que los hombres en esta familia.

"Oh, es precioso. Soy Narcissa, la madre de Draco, pero puedes llamarme Cissa". Dice mi madre acercándose y abrazándolo. Noto la ligera tensión antes de que se relaje. No tarda mucho en acercarlo a Bellatrix mientras empiezan a mimarlo. Pongo los ojos en blanco y me acerco a mi padre.

"El chico no sabrá qué hacer con esas dos". Me dice. Capto una pequeña sonrisa y me relajo. De todos, mi padre era el que más me preocupaba a la hora de aceptar a Logan. La adopción no era algo que hiciera un Malfoy.

"Sí, bueno, puede unirse al grupo". Me río. Mi padre por fin se vuelve hacia mí.

"Será un buen miembro de la familia, pero espero que planees tener el tuyo propio". Parpadeo. Yo ni siquiera estaba unido todavía y él estaba hablando de niños. Mattheo se acerca y por suerte me salva.

"Con lo mucho que Hailey adora a Logan, tengo la sensación de que nuestra casa se llenará de niños. Después de que las cosas se calmen, por supuesto. No tiene sentido precipitarse y arriesgarse a que salga herida". Dice haciendo que mi padre asienta con la cabeza antes de acercarse a mi madre.

"Voy a hacer que Logan le llame abuelo al menos una vez. Creo que será muy divertido". Me río entre dientes ante sus palabras viendo a mi familia con mi nuevo hijo.

Hailey

Nos retiramos a nuestra habitación después de acostar a Logan. Parece que ya quiere a todo el mundo y me alegro de que todos le hayan aceptado. Mis compañeros y yo nos preparamos para ir a la cama, pero mi plan para esta noche me ronda por la cabeza. Al salir del baño los veo a los dos ya en la cama. Draco está más cerca de mí y respiro hondo. Era ahora o nunca, no podía dejar que el miedo siguiera gobernando mi vida. Me subo al regazo de Draco y sonrío ante su expresión de sorpresa.

"Quiero esto. Quiero el vínculo pero aún estoy nerviosa, así que tenemos que tomarnos las cosas con calma". le digo. Draco tarda un momento en asimilar mis palabras antes de acomodarse y besarme. Me dejo llevar por el beso y gimo mientras él lo profundiza. Siento los labios de Mattheo en mi hombro mientras su mano recorre toda mi columna. Siento calor en el bajo vientre y empiezo a retorcerme. Draco gime y me agarra por la cintura apretándome contra su erección. Rompo el beso y un fuerte gemido sale de mí. Draco me levanta y me lleva al borde de la cama. Mattheo empieza a besarme mientras Draco me quita mi pantalón de dormir. Me tenso un poco y Mattheo rompe el beso.

"Relájate Ángel, déjale que te haga sentir bien". Asiento y fuerzo mi cuerpo a relajarse. Sabía que nunca me harían daño. Draco empieza a besarme el estómago y va bajando mientras Mattheo me chupa y me muerde el cuello. Me retuerzo al sentirlo, necesitando algo que me quite el dolor. Draco se ríe antes de pasar lentamente el dedo entre mis labios, deteniéndose en mi pequeño punto sensible. Me estremezco ante la sensación. Su dedo es sustituido por su lengua. Echo la cabeza hacia atrás y su nombre sale de mis labios. Me quita la camisa con la mano y sigue besándome la clavícula y bajando hasta chuparme el pecho. Puedo sentir un poderoso orgasmo y Draco como si lo sintiera empuja dos dedos dentro de mí. Me retuerzo como una banda elástica gritando mi liberación. Él continúa sus movimientos mientras yo supero mi orgasmo.

"Dime que quieres esto". Me dice mientras se quita los bóxers. Su erección me hace abrir los ojos, pero asiento con la cabeza. "Necesito palabras". Dice con más fuerza.

"Sí, te deseo". Sonríe antes de empujar lentamente dentro de mí. Los recuerdos inundan mi mente hasta que una mano me acaricia la mejilla.

"Ojos en mí Ángel." No me había dado cuenta de que había cerrado los ojos. Miro los ojos oscuros de Mattheo y me relajo cuando Draco empieza a moverse. Gimo amando la sensación de él llenándome. Mattheo se sienta en la cama y se quita los bóxers. Alargo la mano para agarrar su palpitante erección sin querer descuidar a uno de mis compañeros. Gime cuando empiezo a acariciarlo. El ritmo de Draco aumenta y no tardo en gritar otra vez.

"Déjame probarte". Jadeo mirando a Mattheo. Sus ojos brillan de necesidad y sonríe. Le veo asintiendo a Draco antes de que me dé la vuelta otra vez, esta vez a cuatro patas sobre la cama. Draco no tarda en penetrarme de nuevo mientras Mattheo acerca su erección a mis labios. Abro la boca y gimo al sentir su sabor. Su cabeza cae hacia atrás mientras gime. Draco empuja hacia delante y me hace recibir más de Mattheo. Mis gemidos parecen incitar a mis compañeros a tomar el control. Draco me agarra las caderas con tanta fuerza que te garantizo que habrá moratones mientras me penetra. Mattheo me agarra del pelo y empieza a follarme la boca. Me pierdo en el placer, todos los pensamientos abandonan mi mente. Grito todo lo que puedo mientras otro orgasmo se apodera de mí y ambos hombres encuentran su propio orgasmo. Me trago hasta la última gota y gimo cuando Draco se corre. Una luz dorada se forma a nuestro alrededor y jadeo cuando el poder se dispara a nuestro alrededor al establecerse el vínculo. Es como si pudiera sentirlos a los dos justo debajo de mi piel, lo que me provoca un hormigueo que recorre todo mi cuerpo. Draco agita la varita para limpiarme antes de que Mattheo me acerque a él.

Mattheo

Hailey se duerme en cuanto se acurruca en mí. No puedo apartar los ojos de ella. Era realmente perfecta. Cojo mi varita y suelto el hechizo silenciador que, por suerte, había colocado sobre la habitación cuando ella dijo que quería el vínculo. No dudaba de que la casa notara la oleada de poder, pero no me importaba. Oigo a Draco reírse entre dientes y me giro para mirarle.

"Me alegro de que hayas pensado en eso". Dice.

"No me habría importado si no hubiera sido por Logan" Digo sonriendo.

"Oye, quería preguntarte por qué la llamas ángel". Vuelvo a mirarla apartándole un mechón de pelo de la cara.

"Porque es mi ángel en este infierno". Vuelvo a relajarme en la almohada cerrando los ojos. Me duermo con la sensación de mi compañera recorriéndome.