El defecto

Dos

'El verdadero motivo'

Desconecté los cables de alimentación mientras espero que los cables que tengo en mi mano izquierda no se confundan, busqué el detonador de neutrones y lo quité.

Los cables no se parecen en nada a lo que muestran en los estúpidas entrenamientos, cuando iba a desactivar los cables de uranio algo falló, fallé y comenzó a sonar una campana. El sonido de mi falla.

Me saqué la mascarilla tirándola al suelo. Le di un golpe con mi pies a la estúpida bomba maldiciendo por lo bajo.

—Azery —escuché la voz de mi padre llamarme.

Incliné mi cabeza para atrás cerrando mis ojos.

—Padre.

—Bon tampoco la desactivó.

—No se trata de Bon, se trata de que es la tercera vez y no logro terminarla. Es estúpido.

Escuché su risa y eso hizo que volteara a verlo. Sus canas ya dominaban la mayoría de su cabello.

—Eres igual que tu madre —seguido me suele decir eso, lo malo es que yo no la recuerdo. No lo suficiente para saber a que se refiere. —Entra.

Obedecí dejando esa bomba atrás, en la casa un Hex ya esperaba por nosotros. Bon, mi hermano, estaba practicando con otro robot sus movimientos, uno que papá había creado. Él se había conectado a través de un neurotransmisor que lo ayudará a operar a distancia a el robot, él quiere probar que el uso de los transmisores puede manipular a la perfección un mecanismo, en este caso al robot que tiene justo al frente. El chip de Vila que Bon tiene también le ayuda con el manejo, ya que se conecta a través de este también.

Es un robot tamaño promedio, nada exagerado comparado con los otros inventos de papá.

—¿Sabes que? Logré que este pueda copiar mis gestos faciales, bueno solo algunos. Papá les hizo las caras muy duras. —Bon siguió haciendo maniobras con el robot

—Sin movimientos es la palabra —le corrigió papá.

—El día que mi padre—hice énfasis en esta palabra. —Me deje conectar a un robot te enseñare como lo hago, de seguro será mejor.

—Azery tu hermano es mayor, tú aun no. No me pides que deje de cuidarte.

Rodé los ojos. —Como digas.

—No olviden desayunar, tengo que salir. Ninguno vuelva a intentar lo de la bomba —se despidió de nosotros con un beso en la cabeza.

Cuando el Hex avisó que mi papá ya se había marchado me senté con desgarbo en una de las silla.

—¿No te vas a poner a llorar por eso o si? —ese es Bon entrando en acción después de que papá se va.

—¿Me ves llorando? Tú papel siempre termina cuando mi padre se va ¿verdad? —me cruce de brazos. —Lo había olvidado.

—Y tu no juegues conmigo el papel de hija perfecta, ya se fue papá puedes dejar de impresionar.

Sus ojos verdes, igual que los de mi padre, mostraban el desafío en su mirada, lo que incrementaba.

—¿No crees que estamos lo suficientemente grandes para peleas? —arquee mis cejas. —Esta vez no le mentiré a papá si llegas a romper algo por tu falta de control.

—¿Mi falta de control? —me di cuenta como estaba acercando a mi su robot. —Tu eres quién siempre quiere acaparar toda su atención.

—No es mi culpa ser la mejor —el golpe que dio el robot a mi lado me hizo sobresaltar. —No busques peleas cuando tu estas respaldado por esa máquina y yo no —me levanta de la silla dispuesta a irme, no me prestaría para llevar otra pelea con Bon.