، 🥂 : Amantes.

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—Eso, sigue moviéndote así —jadeó mientras se impulsaba hacia arriba para poder dar una buena estocada.

—¿Quiere daddy que siga saltando en su polla? —dijo mientras seguía con sus movimientos sensuales sobre la erección de su pareja.

Jungkook solo gruñó en respuesta.

Y nuevamente tienen ese déjà vu. No saben cuántas veces han parecido vivir la misma escena una y otra vez y es que los efectos que ocasionan en el otro siguen siendo lo mismo.

No es una novedad que ellos nunca tienen suficiente del otro. Recién en la mañana Jimin despertó a Jungkook dándole una muy buena mamada que hizo que el castaño decidiera devolverle el favor a la hora del desayuno.

—Ya estoy por... por llegar —anunció el rizado.

Unas estocadas más, brinquitos más, caricias y besos por aquí y allá y ambos se corrieron.

—Me encanta como me montas cada vez.

—La práctica hace al maestro —respondió y se acostó a un lado de Jungkook. El castaño lo envolvió en sus brazos y le dejó un beso en su frente.

—Te amo mi amor —dijo soltando un suspiro mientras cerraba sus ojos.

Había pasado apenas unas tres semanas desde que Jungkook le pidió nuevamente a Jimin ser su novio de una manera más detallista a como fue la primera vez.

Luego de haber hecho el amor en el local que ahora sería el nuevo restaurante de Jimin, decidieron ir a Boseong para hablar con los papás del menor, esta vez Jungkook quiso hacer lo correcto.

Así que pidió permiso para poder estar al lado del rizado de una manera decente. Pudieron aclarar las cosas por petición del ojiazul, obviando algunas partes en donde los involucraba una cama.

Jimin seguía viviendo con Taehyung en Seul, pero de vez en cuando se quedaba en casa de su novio. Para nadie no fue raro ver algunas cosas de Jimin en casa de Jungkook, tampoco les sorprendió la manera en que ambos solían ser muy hogareños y familiares.

Era sábado, ambos se encontraban en casa de Jeon luego de haber salido a beber con sus amigos la noche anterior.

—Hay que levantarse, recuerda que hoy tenemos la tarde en familia —acordó el rizado.

—No nos van a extrañar si faltamos.

—Kook, sabes que no podemos faltar, es más, los chicos se fueron desde la mañana.

—¿No pusiste atención? Te llamaron para decirte eso.

—No podía escucharlos cuando toda mi atención estaba en cómo te comías mi pene, ¿qué esperas?

—Bueno, yo si escuché, además esta vez tu madre y nana nos acompañarán.

—¿Estarán todos?

—Todos.

—Bien, recuérdame, ¿por qué hacemos esto?

—Porque nos hicimos novios y ahora nuestras familias se unieron y les gusta poder pasar momentos agradables para el recuerdo.

—Eso no era parte del trato cuando te propuse ser novios, no quiero salir de esta cama, solo quiero quedarme contigo —renegó.

—¿Te arrepientes? Es decir, ¿extrañas qué solo seamos amantes de rato para no tener que tener estas reuniones familiares? —preguntó inseguro.

—Jamás, amo todo el paquete pero justo hoy, solo quiero quedarme aquí y hacerte el amor de todas formas, por ejemplo acariciar tu cabello hasta que te duermas.

lovers › kookminWhere stories live. Discover now