Manjiro Sano más conocido como Mikey para todas aquellas personas cercanas, es un conocido modelo que tiene todo lo que deseara: Fama, riquezas, mujeres. Estaba en su mejor momento pero alguien vendrá a interrumpir esos planes.
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Ren estaba algo tímido mientras estaba sentado en el sofá moviendo sus pequeños pies, estaba algo confundido y entretenido mientras miraba a su papá Manjiro caminar desesperado de un lado a otro.
-Eh... Niño, bien...- Intentaba mirarlo, rápidamente agarro su mochila de oso panda que traía con el y vio que ahí habían varios papeles y documentos que decían toda información.- Tu cumpleaños es el... ¿1 de Mayo?- rápidamente el mayor vio su teléfono y efectivamente era el día de hoy.
-Papi cumplo tres añitos.- Una tímida sonrisa se formo en sus labios mientras hacia el número tres con sus pequeños dedos.
Mikey inmediatamente escucho un ruido de la puerta de alguien aproximándose y inmediatamente supo quién era y que podía ayudarlo con eso.
Lentamente abrió su puerta y ahí vio a Senju pasar algo apurada a su trabajo.
-¡Hey Senju...!- Hablo casi en un susurro fuerte.
-¿Mikey?- La nombrada se detuvo y se dió vuelta.- Por favor estoy llegando tarde.- Le hizo señas en la muñeca.
-Por favor ven...- Le hizo señas de que se acercara.
La chica algo confundida se acercó a el, el Sano cuando estuvo a su alcance agarro su mano y la hizo entrar a su departamento.
-¿Que pasó?- Preguntaba.
-Esto paso.- La guío hasta la sala donde el pequeño niño de cabello rubio estaba sentado.
-Mikey... ¿Que...
-Si... Supuestamente este niño es mi hijo pero... Por favor... Hagamos la prueba de ADN necesito saber si esto realmente me está pasando.- Suplico.
-Bien... Escucha cámbiate lo más rápido posible en iremos a la clínica yo me quedaré con el niño...- Suspiro la albina pues también era bastante peligroso que Mikey estuviera cuidando un niño por qué conociendolo era bastante idiota.
-Voy.- Inmediatamente corrió a cambiarse.
La contraria se acercó a el niño con una sonrisa.
-Hola pequeño ¿cual es tu nombre?- Pregunto con una linda sonrisa.
-Soy Ren...- Respondió tratando de ocultar su timidez.
-Mmm que bonito nombre.- Se sentó a su lado.
-¿Y usted hermosa señorita?- Hablo el niño mirando a Senju con mucha curiosidad.
-Soy Senju, pero puedes decirme Sensen si así te parece más agradable.- Acarició su cabello con una sonrisa, sinceramente el pequeño niño tenía un gran parecido a Mikey definitivamente era su hijo sobre todo por qué el tono coqueto en que menciono el "hermosa señorita" le recordó mucho a el Sano cuando intentaba ligarsela solo que Mikey era medio imbécil como para madurar rápido.
-SenSen.- sonrió muy emocionado Ren.
-¿Y cuando es tu cumpleaños pequeño?- Con una sonrisa tomo una de sus mejillas con suavidad.
-¡Es hoy! ¡es hoy!- Ren se bajó del sofá y Senju juraba que el pequeño casi se cae, mientras comenzó a saltar con alegría.
-Oh vaya ¿pediste algún deseo?- Lo miro con ternura.
-¡Sisisisi! La señorita quien me cuidaba solía decirme que los deseos se hacen realidad.- le sonrió a Senju
-Oh ¿se cumplió tu deseo? ¿Que pediste?- Le pregunto.
-Conocer a Papá, y ahora estoy muy feliz de formar parte de su vida y prometo no decepcionarlo.- con una sonrisa nuevamente subió al sofá y se sentó ahí mientras balanceaba sus pequeñas piernas.
Senju largo un suspiro, realmente aquel niño merecía todo el amor del mundo, era un pedazito de cielo muy tierno.
-Vamos.- El rubio apareció vistiendo unos jeans largos color negro, tenis blancos y arriba tenía una chaqueta color negro.
-Esta bien, vamos bonito.- Senju se levantó del sofá extendiendole su mano al pequeño niño quien la tomo casi al instante
-¿Yo también te puedo tomar la mano mi amor?- Dijo Mikey saliendo tras ella.
La albina lo miro y todo sus ojos.- Deja de ser tan idiota por favor Manjiro estamos en un momento serio.
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Manjiro estaba nervioso mientras estaba en la sala de esperaba, ya hacía una hora que se había echo los resultados tenía miedo de eso, veía como el pequeño Ren jugaba con los juguetes que había en la clínica y se divertía con el camión que tenían allí.
-¡Manjiro! Ya están los resultados.- Senju camino hacia el con unos papeles en la mano.
-¿Que dice...?- Pregunto asustado.
Senju solo largo una risa burlona y veía la cara de miedo que tenía el rubio y se estaba mordiendo las uñas.- ¡Felicidades querido eres papá! ¿Que deseas para el día del padre? Ren y tú llevan la misma sangre.
Mikey definitivamente sentia su mundo irse de cabeza, no podía creer que realmente aquello estaba pasando, entonces el pequeño Ren quien seguia jugando con algunos juguetes de la clínica en el suelo era su hijo de quién ahora debia hacerse cargo por el fallecimiento de su madre Mei, tampoco era que podía dejarlo en el orfanato eso era algo inhumano después de todo Ren no estaba solo en el mundo aún lo tenía a el tendría que tomar la responsabilidad quisiera o no.
Asies el Miguel es papá conforme vaya la historia iremos sabiendo más sobre su mamá y que fue lo que paso ahí y como va a ir el amor entre Mikey y Senju y por cierto les dejo el diseño de Ren para que puedan imaginarlo:
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