LA AMABLE HERMANA MAYOR YA NO EXISTE

PARTE 1: QUIERO DETENER ESTO

(Capítulos 1 y 2)

Simplemente pensé que era raro. Estoy segura que vino a verme, pero salió del cuarto de mi hermana pequeña y ni siquiera me dijo que ya había llegado a mi casa. Ahora camina al lado de ella.

Ahora que lo pienso, era bastante extraño que nadie me lo contara. Mis padres ya sabían que había llegado, entonces ¿Por qué ocultármelo?

Está bien, haré la vista gorda ante esta situación ya que eres tú, pero no lo dejaré pasar la próxima vez.

Mi hermana... la figura de mi querida hermana menor estaba en los ojos de mi prometido.

- Como eres la mayor, debes ceder ante tu hermana pequeña.

Esta es una frase que escuché frecuentemente a lo largo de mi vida.

Riel, mi hermana pequeña, nació con el corazón débil, nuestros padres la querían muchísimo. Debido a su enfermedad, sentiría lástima sin importar quién la viera.

Celebraron una fiesta de cumpleaños cuando Riel tenía diez años. Y casualmente el cumpleaños de Irene y Riel fue el mismo día; el 22 de diciembre.

La nieve que cayó la noche anterior se había acumulado por la mañana. Se sentía como si el cielo estuviera bendiciendo el cumpleaños de estas dos personas.

Irene se vistió para su próxima fiesta de cumpleaños y se dirigió a la habitación de Riel. Sin embargo, Riel todavía se estaba preparando, pero debido a su enfermedad, no podía soportar que la arreglaran por mucho tiempo, es por eso que a veces se tomaba un descanso en el medio.

Riel llevaba un vestido amarillo con volantes cuando entré a su habitación. Mi madre estaba ayudando a Riel a vestirse con sus propias manos. Esta fue la primera vez que vi el rostro de mi madre hoy.

- Riel, ¿Cuándo terminarás?

Preguntó Irene, instando a que se diera prisa, era porque sólo podía ir a la fiesta después de que Riel finalmente estuviera lista. Y luego, la madre empujó a Irene a un lado y le dijo:

- Riel todavía necesita más preparación, vuelve a tu habitación.

- ¿Por qué? Quiero esperar aquí también.

Se quejó Irene.

- Riel se pondrá celosa al verte. Eres la mayor, ten paciencia y espera en tu habitación.

Ordenó su madre.

Tal como dijo su madre, Riel, que estaba frente a la cama, tenía una expresión de envidia en su rostro.

- Quiero usar rápidamente un vestido bonito como tú... hermana.

Dijo Riel mientras la miraba.

- ¡Irene!

Dijo la madre con tono firme.

Sin embargo, las palabras de Riel empujaron más a Irene.

No tuvo más remedio que volver a su habitación y esperar sola. Después de esperar una hora, la niñera llamó a su habitación para recogerla, le dijo que todos los preparativos estaban hechos y que su madre se dirigía primero a la fiesta con Riel.

Cuando llegó con la niñera, la fiesta ya había comenzado. Riel estaba actualmente soplando una vela en el pastel con su padre a su lado. Cuando apareció Irene, su madre dijo con una mirada de disculpa en su rostro:

- Lo siento, Irene. Riel está enferma y no puede quedarse mucho más tiempo, así que déjala disfrutar este momento.

Ordenó.