Ella sabe como hacer caer a un hombre con facilidad.
Posee el encanto natural que cualquier mujer desearía tener.
Es hermosa, atrevida, sensual, cautivadora y sobretodo manipuladora.
¿Quién diría que terminaría relacionada con uno de sus pilotos fav...
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-¿No es extraño que sigas viviendo en casa de Josh en lugar de vivir con tu novio?- preguntó sirviendo el té y yo hice una mueca.
-De hecho, nos irémos a vivir juntos a Mónaco- dije sonriendo.
-Eso es increíble, me alegra mucho, Less- sonrió antes de beber de su taza -¡Mierda!- alejó la taza de su boca -Esto está hirviendo- la colocó de nuevo en su lugar y yo reí a lo bajo.
-Sale humo por doquier, es lógico que esté muy caliente- dije rodando mis ojos.
-Espera, ¿Mónaco?- preguntó con una sonrisa en sus labios y yo asentí.
-Sí- afirmé -Tengo casa que ha sido ortorgada pro mis padres porque sabes lo estúpidamente caro que es- este asintió entendiendo la situación -Pero digamos que esta vez Sainz y yo queremos independizarnos y no mezclar dinero de nuestras familias así que hemos comprado una casa- dije orgullosa.
-Dime que seremos vecinos- dijo animado.
-Según dice Carlos- me acerqué un poco a él y hablé a lo bajo como si revelara un secreto -Nuestra casa queda a dos de la tuya- sonreí al igual que él.
-Me alegro mucho- dijo viendo la taza de té y una sonrisa sobre sus labios.
-Dime... ¿la buscaste?- pregunté y este soltó un enorme suspiro y me miró.
-No quiere ser encontrada- dijo sonriendo con resignación -O mejor dicho, no quiere que yo me acerque a ella- hizo una mueca.
-¡Vamos, Charles! es imposible que no puedas acercarte a ella- dije tomando la taza.
-Te dije que las cosas no terminaron bien- pasó su mano por el cabello -De verdad te agradezco por darme el valor a terminar una relación falsa y no dejarme de la escudería- sonrió.
-Para eso están los amigos- sonreí antes de dar un sorbo.
-Te quiero- dijo tocando mi hombro.
-Gracias- solté y este estalló a carcajadas.
-No pues... un placer- dijo riendo y yo le seguí.
-Lo siento- me disculpé tratando de calmarme -Es una reacción normal- me excusé -Pero también te quiero- sonreí.
-Todo queda bien entre nosotros, ¿verdad?- preguntó.
-Como si nunca hubiese sucedido- sonreí y este me miró aliviado.
-Gracias, Less. De verdad, eres una gran mujer-
Y así continuamos hablando más sobre temas varios mientras bebíamos una taza de té acompañado de un postre que habíamos comprado en una cafeteria random.
Carlos había salido con su padre a jugar golf con Lando y Caco así que me había quedado junto a Charles pasando una tarde relajada.
Nos habíamos puesto al día sobre cosas que hicimos durante las navidades y eventos a los que asistimos.