Epílogo

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—Es un honor presentarles al alumno graduado con honores de la facultad de ciencias económicas

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—Es un honor presentarles al alumno graduado con honores de la facultad de ciencias económicas. Un alumno que desde su comienzo se convirtió en un claro ejemplo. Por favor, darle un merecido aplauso a Rhys Joshua Harwthorne Conolly— dijo el rector.

Las personas comenzaron a aplaudir y otros soltaban algunos gritos llenos de emoción mientras Rhys subía al escenario y saludaba al resto de estudiantes.

—¡Eso Rhys!— gritó un chico.

Le tendió la mano al rector y este lo abrazó con mucho orgullo. Saludó al resto de la mesa de honor y luego se acercó al micrófono para hablar ante el público presente.

Los aplausos poco a poco se detenían y este no dejaba de sonreír.

—Estoy...— dijo para luego carraspear —Estoy muy agradecido por toda esta experiencia—

Todos guardaron silencio para escuchar con claridad lo que Rhys decía.

—No saben lo feliz que me siento. El orgullo que siento por culminar mis estudios en una de las Universidades más prestigiosas del mundo y por el hecho de que mi abuelo y mi padre formaron parte de del cuadro de honor. Y hoy me tocó a mi representar a loa Harwthorne y seguir sus pasos que como tanto esfuerzo lo lograron. Estoy orgulloso de tener la familia que tengo. Estoy feliz de haber crecido con mis padres, ellos me motivaron, a mi padre por ayudarme a no perder la fe. Mamá, gracias por siempre darme lo mejor y educarme de la mejor manera— pronunció haciendo contacto conmigo —Sin ti, no hubiese logrado todo esto. Fuiste mi mayor apoyo durante todo este tiempo. Ahora es momento de demostrarte y recompensarte todo lo que has sembrado en mi. Te amo, mamá— sonrió y todos comenzaron a aplaudir y gritar en celebración a sus palabras.

Minutos después la ceremonia había terminado y Rhys se encontraba con sus compañeros platicando un rato.

—No puedo creer que ya haya terminado su carrera— dije recostando mi cabeza sobre el pecho de Sainz.

—Lo sé— suspiró —El tiempo pasa tan rápido— susurró besando mi cabeza.

—¡Mamá!— escuché y miré al frente.

Rhys venía sonriendo a mi dirección.

Me separé de Sainz y extendí los brazos para recibirlo con los brazos abiertos.

—¡Mi amor!— dije abrazándolo con fuerza —¡Felicidades mi precioso niño!— me alejé de él y besé su mejilla —No sabes lo orgullosa que me siento— dije acariciando sus hombros.

—No eres la única persona orgullosa— escuché a mis espaldas.

—¡Papá!— dijo este acercándose a Carlos —¡Lograste venir!— dijo este completamente feliz.

—¿De verdad creíste que iba a estar ausente en este día tan importante?— preguntó un poco ofendido.

—Aria me dijo que no vendrías— dijo nervioso.

Burning Desire || Carlos Sainz Kde žijí příběhy. Začni objevovat