ME ENAMORÉ DE UNA ARMY

16

—No me jodas Nam —se sintió frustrado, no había contado con que su trabajo tenía estos entresijos.

—Son órdenes de arriba a mí no me mires —le levantó las manos en son de paz.

Jungkook bajó su cabeza y se peinó el pelo antes de subirla y soltar el aire.

Después miró a TN que le devolvió la mirada.

—Ven, vamos a un lugar, debemos hablar —la agarró de la muñeca para que lo siguiera.

Ella miró tras su hombro.

—¡Encantada de conoceros!

Salieron por la puerta y sin hablar atravesaron un largo pasillo, hasta que llegaron a una habitación llena de instrumentos.

Jungkook cerró la puerta.

—¿Qué ocurre? —le preguntó a él—. ¿No quieres ir? ¿Es algo que no te gusta? No sé...

Él tenía la mano puesta en la pared lejos de ella que estaba en el centro de la habitación, su rostro estaba hacia abajo. Lo levantó. Se quedaron mirando.

—Vente conmigo —le dijo de repente.

—¿Yo? —dijo ella sin entender.

—Sí, tú y yo, a Nueva York, juntos, sin nadie más. Iré solo, ya has oído a Nam, mírate, has venido a verme y ahora... —no le había gustado ésta vez lo que su agenda le tenía preparado.

Estaban en el pequeño estudio de grabación de Jungkook. Jamás había entrado una chica por esa puerta.

—¿Estás loco? No sabes lo que dices —TN se asustó cuando entendió que era verdad que quería que se fuera con él—. Te esperarán en el aeropuerto, si ven a alguien que no es de tu nacionalidad se preguntarán quién es, voy a darte problemas nada más pisar aquel lugar que estará lleno de periodistas —ella no quería que sufriera las consecuencias de tener que dar explicaciones sobre la chica extranjera que lo acompañaba.

—Nadie sabe que viajaré solo, esperan que lo haga con el grupo, ésto no estaba preparado con anterioridad —se acercó despacio y tocó su mejilla—.  Me gustas, ya te lo he dicho, y me cabrea que ahora que hemos conseguido estar de nuevo juntos, tengamos que separarnos.

—Es que no sé...

—No me gusta...mejor dicho me asusta que te acobardes por la vida que llevo. Que en tu mundo conozcas a alguien más después de sentirte mal porque no te he tratado como te mereces.

Como si eso fuera posible pensó TN, ¿Quién se olvidaría de un chico cómo él? Guapo, con un cuerpo de infarto, enérgico, simpático y a veces pasional. Jamás creyó verse atrapada por alguien como Jungkook. Algunas si lo supieran la llamarían "La elegida de Dios'. Y con razón.

—Arderán las redes sociales Jungkook, será una catástrofe, ¿Sabes siquiera como somos las ARMYS? No nos gusta veros con nadie —se sintió por un momento avergonzada, aunque él era el chico que le gustaba, también era un BTS y demostrarle sus sentimientos como fan la avergonzó.

Jungkook le sonreía, puso esa sonrisa que volvía loca a cualquiera y TN se ruborizó.

—¿Se te olvida que tengo redes sociales? ¿Se te olvida que a través de Instagram nos conocimos? —se acercó un poco más a ella y la miró a los ojos. Los suyos brillaban por esa constelación que a veces aparecía para llenarlos de estrellas, tenían un negro tan intenso que TN supo en ese momento, que serían su lugar favorito por toda la eternidad.

Esos eran ojos que toda Jungkookbiased quería ver de cerca.

—No hagas esto —dijo ella intimidada.

—¿Qué hago? —su voz se volvió ronca.

—Lo sabes muy bien —la voz de TN era ya un susurro. Tragó intentando calmarse.

—Quiero besarte —aquello los sorprendió a los dos, a ella porque no lo esperaba y a él porque su cuerpo se lo pedía a gritos—. Lo necesito, he soñado con ello todos los días que hemos estado separados, quería entonces y quiero ahora probar el sabor de tus labios otra vez —¿Sabía él lo que la hacía sentir?

Ella no puso resistencia y en un momento estaba Jungkook besando a TN.

Se pegó a ella para sentirla, la deseaba demasiado como para no buscar el contacto y el calor de su cuerpo.

Una de las manos de Jungkook acariciaba su nuca y la otra su cintura, él era algo más alto que ella y había bajado su rostro para acoplarse a la chica que le gustaba tanto.

TN pudo sentir cada músculo que tenía JK, se pegó tanto que sintió todo el poder que emanaba de su pecho.

Los besos eran intensos y empezaron a tornarse un tanto salvajes.

—Sabes genial —le susurró él en su boca y la volvió a saborear.

Cuando se separaron juntaron sus frentes y se miraron a los ojos.

—Quiero contarte cosas, quiero tener a alguien con quien hablar, ¿Entiendes lo que te digo?

—Jungkook, o Dios...

—Voy a borrar mis historias de Instagram —le dijo sin dejar de acariciarle la mejilla con su dedo— te lo digo para que veas que ya voy a empezar a contarte de que va mi vida, y que veas que voy en serio contigo.

TN abrió la boca.

—¿Porqué harías una cosa así? —le dijo desde cerca, sus labios estaban a centímetros—. Vas a matar al fandom si lo haces, ¿Sabes cómo se van poner? —ella sabía que sería un gran revuelo cuando encontraran todas esas historias y publicaciones que tanto disfrutaban, destruidas.

—No me va muy bien con la aplicación, subo algo y luego no me gusta el resultado y encima no entiendo lo que escriben los demás. Seguiré en weverse, es un lugar más seguro para mí y me gusta más ya que es de mi país.

—¿Quieres decir que ahora tengo descargar la aplicación esa para saber de ti?

—Tú tendrás una aplicación mucho mejor, y será solo para tí —la besó—. Nadie aparte de los chicos y mis padres tienen mi número de teléfono. Eso es importante, ¿no crees?

—Tengo miedo —le susurró ella con los ojos fijos a los suyos.

—¿Pero porqué? Yo nunca dejaría que te hicieran daño. Ya eres importante para mí.

—Pues por eso lo tengo, porque no quiero verte en medio de lo que llegaré a provocar si se enteran. Si todo explota estarás entre la espada y la pared, y no quiero que tengas que elegir, porque entonces sé quién va a perder.

—Algún día tendrán que entender...

—Eso es, algún día...pero por ahora no creo...