Al Nivel [ GUAPODUO ]

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Antes de iniciar eh de decir que esto es importante aunque me duela, no será como sucedió originalmente pero después entenderán, no está tan especificado pero pues si no les va pareciendo salten todo el capitulo, al final pondré el porque lo puse haci.

Gracias por su atencion

Inicien a leer

La noche cayó rápidamente, ninguno de los jóvenes volvían puesto que todos se quedarían con distintas personas quienes conocieron y decidieron acercarse más, en aquel hogar solo estaba Spreen y Roier, el primero se mantenía ocupado arreglando sus armas, el era precavido con estas, siempre impecables, como si apenas hubieran sido construidas.

Roier por su lado ahora estaba en la cocina preparando un buen manjar para ambos, su siesta no duró mucho debido a que llego Missa con un pequeño gato regalo de aquel tal Phliza, después un pequeño cachorro apareció y Roier decidió adoptarlo, pronto Spreen le menciono que el Quackity le entrego ingredientes para hacer tacos, Roier sonrió y le menciono que le haría aquellos tacos qué el tanto quería.

Miro la hora y decidió llamar a su compañero

Roier: spreen no olvides tomar tu médicamento

Spreen: ya me lo tome boluo

Roier: más te vale

Spreen tenía un gran dolor, ese dolor tenía nombre aunque nunca a sido mencionado, se trataba del progenitor de Spreen, aquel hombre causó tantos traumas en el, aparte de que lo saco a la calle y después a su reencuentro se encargo de romper la estabilidad de Spreen, el oso no agunto más y se prometió a si mismo matar a aquel hombre en todas las vidas posibles, aunque debido a eso comenzó a tener alucinaciones, donde las personas se parecían a aquel odioso tipo, Spreen perdía el control y comenzaba a atacar tratando de asesinar a aquel hombre y por fin obtener paz en su corazón.

Al terminar de preparar aquella cena llamo a su amigo quien llegó con un bote de pastillas, y en su otra mano había un pequeño paquetito de dulces, regalo de un angel que paseab por la isla, aunque Spreen no lo veía, fue Quackity quien le entrego todo aquello.

La cena paso tranquila, ambos reían y hablaban de sus planes a futuro, quizás ir a explorar un nuevo lugar, salir a divertirse y conocer nueva gente, sin dudas tenían muchos planes.

Al terminar la cena spreen tomo uno de aquellos dulces, era una menta qué se miraba muy deliciosa, sin dudar se la comió y siguió su platica con el híbrido araña, tomo el bote de pastillas y se levantó caminando hacia Roier para conseguir un vaso, aquella caminata fue detenida por un gran mareo.

Roier corrió con rapidez para sostener a su compañero, esos mareos eran el inicio de una pesadilla para cualquier ser, Spreen solía demostrar quien era realmente cuando veía la cara de aquel hombre mentiroso.

Roier: spreen...compañero? Por favor ahora no hagas esto

Lo inevitable paso, spreen ahora se miraba más alto, más fornido, y en sus ojos no había más que ira pura, Roier se hizo para atrás rápidamente sacando un escudo, podía luchar contra cualquier persona menos con Spreen, ese hombre era su punto débil y no podía simplemente tocarlo, con agilidad se movió por su casa hasta quedar cerca de su puerta, tenía al pequeño gato y al perrito en sus manos, no importaba qué fuera, spreen solo buscaba venganza.