Al Nivel [ GUAPODUO ]

13

Los minutos pasaron a horas y las horas en días.

Spreen estaba de regreso y ahora lucia más...tranquilo? Sonría al saludar y siempre estaba serenó, ya no mantenía esa pose ruda y esa mirada asesina.

Roier por su lado si guía normal con su vida, el no era de llorar y creer que su mundo caería solo por el desprecio de otros, ya lo habia experimentado anteriormente con su esposo no esposo, quizás al antiguo Roier le hubiera dolido y se hubiera hechando a la depresión, pero no lo haría, el no era ese pobre tonto iluso que creía que todo se solucionaba con un helado y bonitas palabras de una TV o de alguien más.

En ese tiempo se junto mucho con aquel chico Quackity y conoció a la hija de este, una pequeña niña con mucha energía que siempre mantenía una sonrisa, era ruda y cariñosa, al parecer fue resultado de una noche de pasión entre Quackity y 2 miembros más de la isla, su único dilema era que ninguno de los 3 querían estar atados a una hija y la descuidaba demasiado.

También conoció a un pequeño niño que robo todo su corazón.

Su nombre es Bobby, el junto a Jaiden lo encontraron al borde de la muerte mientras explotaban, tenía un pequeño palo de madera y habían unos mods muertos.

Desde que ambos lo vieron corrieron a ayudarle y lo llevaron a casa de Roier, lo curaron y lo dejaron descansar, no se despegaron de aquella cama hasta que el pequeño despertó, se parecía mucho a ambos, el menor se mostró valiente y en menos de 5 minutos ya estaba siendo adoptado por ambos chicos.

Los lobos de ambos aullaban de felicidad, aquel niño les alegro el corazón.

Como cada día, Roier estaba con Bobby y con Jaiden, preparaban el desayuno mientras cantaban, eran puras risas, era un momento hogareño.

Todo seguiría haci de no ser por el llamado de la puerta, bobby salió corriendo a abrir y regreso con tilin y con otra pequeña más, esta tenía lentes y parecía haber llorado.

Roier: Tilin! Como estas pequeña traviesa

Tilin: |Pa Roier! Estoy aburrida, traje a Juanaflippa, ella estaba triste en su casa|

Roier: llegaron justo a tiempo niñas, el desayuno esta servido -mira a Juanaflippa- ya desayunaste

Juanaflippa: -niega-

Jaiden: -entra con una diminuta sonrisa- ya esta todo listo para servirse -mira a las menores- o Flippa, Tilin vengan a la mesa pequeñas, deben estar hambrientas

Roier: la conoces?

Jaiden: yes, es la hija de Slime...el tipo la descuida por andar de caliente a veces la cuidaba yo pero se me dificultó por el trabajo

Roier: ujum entiendo, bueno pequeñas es hora de desayunar andando

Sentir el amor de 2 padres, el sentimiento cálido de tener la atención, el cariño y la preocupación sin duda era algo de lo que bobby gozaba, desde que llegó a la vida de Roier y Jaiden siempre lo han tratado con amor, le adornaron un cuarto, le compraron cosas para que siempre se divierta, lo llevaban a pasear a cualquier lado, le cantan y siempre puede confiar en ellos, era muy diferente a lo que otros niños vivían tal como Tilin qué siempre estaba encerrado en su hogar sin comida y esperando a que alguno de sus padres fuera a verle y darle algo para que coma, claro que debido a eso habían días donde no comía, Juanaflippa pues ella decidía mejor solo estar callada y agachar la mirada, Slime solía ser demasiado estricto y cuando no se cumplir con lo que el quería recibía una gran regañada y un castigo doloroso, con la llegada de ElMariana todo parecía ir peor, ahora era escucharlos pelear a diario y lanzarse cosas, algunas de ellas con suerte las esquivaba pero no todas, su cuerpo maltratado era claro ejemplo, todo por la ira de sus padres.