Dias Mejores - Parte Cuatro

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Dear Readers, 

Perdón por la demora en publicar este capítulo. Todo esto sólo es posible gracias a lamaizita !


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Días Mejores – Parte 4

Ceylin se paró frente al espejo y se giró de lado para mirar su reflejo.

Se levantó la blusa, buscando una panza inexistente en la parte inferior de su vientre.

¿Qué debería esperar de ahora en adelante si realmente estaba embarazada?

El nacimiento de Evrim había sido brutal. Ceylin nunca había sentido tanto dolor en su vida.

Pero cuando pensaba en ese día, lo primero que le venía a la mente era la alegría y el amor que la embargó en el momento en que vio el rostro angelical de su bebé y logró abrazarla por primera vez.

Sospechaba firmemente de un nuevo embarazo, pero la prueba que había comprado en la farmacia seguía sellada en un cajón. Ceylin no estaba segura de qué era exactamente lo que le impedía realizársela. Ella siempre había sido razonablemente práctica y decisiva. Por mucho que algo la intimidara, Ceylin normalmente lo enfrentaba de frente.

Sus pensamientos invariablemente regresaban a la escena que había presenciado ese mismo día y sentía malestar del estómago. Ceylin creía conocer muy bien a su marido, pero verlo reír y hablar con personas que nunca había conocido había hecho que la abogada se preguntara cuánto sabía realmente sobre el pasado de Ilgaz.

Ceylin miró a su hija sentada sobre una manta mullida en el suelo y le sonrió. Evrim se mantenía entretenida con un mordedor colorido y masticable con forma de llave. Su bebé se había convertido en la parte más importante de su vida en el mismo momento en que Ceylin se enteró de su existencia. Amaba a su hija con una intensidad que la asustaba, ya que el abogada nunca había imaginado que tales sentimientos pudieran existir.

Era como si el amor por su hija le diera la fuerza para luchar contra cualquier cosa mientras la inundaba constantemente de ansiedad, sabiendo que nunca sobreviviría si algo le sucediera a la niña. Ser madre era a la vez maravilloso y aterrador.

En el fondo, la abogada se preguntaba si amaría igual al otro bebé.

La verdad es que durante la mayor parte de su vida nunca había pensado en casarse y tener hijos. Sin embargo, Ceylin no se arrepentía de la elección que había tomado. Al final del día, su marido y su hija eran el centro de su mundo. Pero reflexionar sobre tales asuntos hacía que la abogada recordara su conversación con Ilgaz ese mismo día, cuando ella había recogido a Evrim de su oficina después de su audiencia.

Ceylin recordó que, hace aproximadamente un año, cuando se enteró por primera vez de la existencia de Yasemin, le preguntó a Ilgaz qué había llevado al final de su relación. Su marido había sido muy honesto y le confeso que Yasemin había roto con él y no al revés.

Hoy temprano, Ceylin finalmente le había preguntado sobre las razones detrás de la ruptura. Con su habitual franqueza, Ilgaz le comento que Yasemin había puesto fin a todo porque ella había expresado su deseo de casarse y tener hijos, y que él no compartía esos planes.

La revelación había tomado a Ceylin un poco por sorpresa. Durante la tarde, su cabeza había estado zumbando con diferentes preguntas, y ahora sus pensamientos estaban tomando un giro ligeramente incómodo.

Intentaba deshacerse de ellos pero no podía evitar que su cerebro conectara algunos puntos.

¿Podría ser que Ilgaz todavía sintiera lo mismo? Después de todo, había muchas cosas de las que nunca habían hablado. Su matrimonio había sido una decisión impulsiva. La primera vez que Ceylin quedó embarazada también había sido por casualidad. La dolorosa pérdida la había hecho sentir aún más cerca de Ilgaz; eso era cierto. Y parecía querer un hijo tanto como ella. Pero, ¿podría ser que su marido había accedido a intentarlo de nuevo porque sabía que Ceylin realmente quería un bebé y no porque en realidad quisiera ser padre?

The Kayas (Versión en Español)Where stories live. Discover now