Capítulo 23

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El sol resplandece, el cielo tiene un color maravilloso como el paraíso, el clima es cálido pero tiene su cierto calor, no es sofocante, la brisa de encarga que no hacerlo así. Me encanta este lugar, por mí podría vivir acá pero no todos los sueños se cumplen ¿Verdad? Hay algunos que son verdaderamente imposibles, otros que son casi imposibles pero se pueden lograr.

Me encuentro recostada en una silla de esas que sirven para broncear, obviamente me unte protector solear. Miro a mis amigas en la piscina, Chrystalle está charlando con un chico morocho y Samy se encuentra con Kyle muy juntitos. Desde la vez que Nick estaba a mi lado, no lo he visto desde entonces ¿Qué estará haciendo? Seguro se está ligando con una perra. Siento algo extraño al pensar en que se está ligando con otra, es como una oleada de furia combinado con decepción pero ¿Qué carajos? ¿No estoy celosa? Naah. No tengo porque estar celosa, de todos modos él solo es mi amigo y yo lo quise alejado, creo que es mejor así.

—Disculpa ¿Está ocupado?—me pregunta un chico castaño, ojos cafés claro, tez blanca, labios pequeños y de grosor no tan gruesos, se parece a Justin Bieber, en serio, no los estoy jodiendo. Bueno, creo que estoy delirando ya que digo que el chico se parece a mi ídolo y hasta su peinado tiene; el castaño me señala la silla que esta con el bolso de Samy y Chrystalle.

—Oh no, discúlpame, es que mis amigas son un poco descuidadas— digo retirando los bolsos, realmente mis amigas son frescas no descuidadas ¿Qué piensan que la silla es de ellas y no hay personas que quieran tomar el sol?

—Gracias —dice el chico esbozando una sonrisa, por cierto linda.

—De nada —le devuelvo la sonrisa y me acomodo nuevamente como estaba antes de que llegara el chico.

—Oye, ¿eres de acá de la provincia?— me pregunta el chico después de cinco cortos minutos. Giro mi cabeza para contestarle.

—No y ¿tú?— le respondo de manera educada. Porque al rato es mi ídolo y yo ignorándolo. Ok no.

—Jade, SUPERALO.

—¡¿CÓMO COJONES ME PIDES QUE LO SUPERE, SI EL CHICO SE PARECE TANTO A MI IDIOLO Y TAL VEZ ESTE HABLANDO CON ÉL EN ESTE MOMENTO?!

—A veces me pregunto que porqué soy tú.

—A veces me pregunto porque tú estás dentro de mí, si eres una insoportable que no me deja soñar.

—No te he vuelto a joder por lo de Nick, esta vez gano corazón pero de igual manera sigo pensando que eres una estúpida autosuicida.

—Estoy cansada de ti. Déjame en paz.

—¿Te encuentras bien? —el castaño anónimo me retira de la charla con mi conciencia. Noto que se ha levantado y se encuentra a mi lado con una cara de preocupación.

—Oh... sí, sí, estoy bien, sólo me fui en mis propios pensamientos. Disculpa —le articulo saliendo de mi trance.

—¿Segura?— me interroga de nuevo pero ya sentado en su silla.

—Sí, muy segura— confirmo, solo me falta preocupar al chico anónimo o peor aún que piense que estoy loca—. ¿Qué me decías?

—¿Cuál es tu nombre? —me pregunta el anónimo mirándome y luego se recuesta.

—Jade ¿Tú? —le digo observando sus movimientos y también a él. Miro que tiene un brazo atestado de tatuajes, estoy suponiendo que llamo a los chicos con brazos tatuados. Además, posee un cuerpo formado, se nota que se la pasa en el gimnasio.

—Neil— responde mirando hacia el cielo y luego me mira. Lindo nombre. El anónimo se llama Neil ¿Entonces? También es con "N" Qué coincidencia ¿No?

Mi ángel vestido de donjuán.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora