CAPÍTULO 26.

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VISITAS

Adeline

Sentía nervios 

Demasiados

Nunca había sentido tanto como hasta ahora. En mi estómago me dolía de los nervios.

Iba a un restaurante para ver a sus padres.

Iba a conocer a su madre...y su padre.

Le hable a mis amigos de la cena con sus padres y lo que me dijeron fue..

“Te mando mi bendición hermana... porque la vas a necesitar”

En teoría se burlaron de mi, los idiotas.

Liam se fue a cambiar por algo más formal.

Pero para mí desgracia no tenía algo un poco formal para la cena y tuvimos que ir al centro comercial.

Mientras me ponía unos aretes pude ver a Liam arreglándose, vestido de ropa negra a través del espejo.

Nunca lo había visto con ropa formal y la verdad me quede quieta contemplando su vestimenta.

Benditos ojos que lo contemplan.

Parpadeo rápido para dejarle de prestarle atención y me enfoco en ponerme un labial discreto y me miró en el espejo con el vestido.

Un vestido lila que se pega a mi figura terminando arriba de las rodillas con unos tacones blancos —que trajo Karol—.

Salgo del baño y choco con Liam que se me queda viendo. Su mirada pasa por todo mi cuerpo dejandome nerviosa.

—¿Si me veo bien?—le digo nerviosa.

Su mirada sube hasta llegar a mi rostro.

—¿Acaso te puedes ver mal? Eres preciosa.

Sonrió y me acerco a darle un beso en la mejilla mientras se oyen risas que entran al departamento.

Nos acercamos a la sala y son Miguel junto con Oliver y Mia, se nos quedan viendo sorprendidos.

—¡Holaaa! ¿Y eso?—pregunta Miguel sorprendido.

—Vamos a una cena con mis padres—dice Liam.

Se quedan viendo los demás incrédulos de que allá aceptado esa propuesta.

Me encogí de hombros, he querido conocerlos desde que nos conocimos y mucho más desde la historia que me contó.

Se me acerca Mía y me toma del brazo.

—Platica de chicas— me toma y asiento. Necesito hablar con alguien.

Se acerca Oliver pero se detiene con nuestra mirada.

—¿Qué?—dice inocente

—Dije de chicas— específica Mía.

—¿Y? Puedo serlo.

Mía voltea los ojos rendida mientras nos sigue Oliver a la habitación de Liam.

Oliver cierra la puerta en cuanto entramos y nos sentamos en la cama.

—Cuentame—dice Mía.

Le explicó lo que pasó en el centro comercial con Melissa y la llamada.

—Me dijo que sus padres quieren conocerme, hablo con ellos y están de acuerdo en vernos hoy, ya que no se sabe cuando vuelva a venir—digo jugando con mis manos en mi regazo.

—¿Y? ¿Qué opinas?—dice Oliver sentando en la cama

—No se, no se...quiero conocerlos pero me da nervios

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