Siempre fuimos tu y yo - Severus Snape.

1- Primer año, primer día de clases.

Natalia estaba muy emocionada de que al fin llegó septiembre y se iría a Hogwarts, su nueva secundaria de magia. Su pelo negro largo con ondas iba de un lado a otro mientras caminaba con su familia, emocionada por todo lo que estaba por suceder. 

Cuando llegó a la estación, se subió muy rápido al tren luego de despedirse de sus padres. Todos los vagones estaban ocupados. De pronto, observó que en uno había solo dos personas, una niña pelirroja muy sonriente y un niño de tez blanca, pelo negro hasta sus hombros con unos ojos cafés muy oscuros, que no parecía ser muy amigable, excepto con la niña.

-Hola – dijo Natali tímidamente - ¿podría sentarme con ustedes? Los demás vagones están llenos.

-Si obvio – dijo la niña – soy Lilly y él es Severus – el niño solo me sonrió tímidamente.

-Un gusto, soy Natalia Scamander – dijo ella sonriendo.

-¿Tus papás son magos? – dijo Lilly hablándole.

-¡Si! Son magos, mi mamá es de Estados Unidos, mi papá es de Inglaterra y estuvo siempre en contacto con Albus Dumbledore, lo ha ayudado en muchas misiones.

-Wow que hermoso – dijo Lilly sorprendida.

-¿Tu papá estuvo con Dumbledore? – dijo Severus.

-Si, pelearon contra un sujeto malo hace unos años. – dijo Natali pensativa, no recordaba el nombre del sujeto.

-Mi mamá dice que Dumbledore es el mejor mago de todos – dijo Severus viendo a Lilly. Natalia se sentía ignorada.

Siguieron hablando de varios temas, como las materias que iban a tener, los profesores que conocían, como era Hogwarts, hasta que entraron cuatro chicos al vagón y se sentaron a su lado. Eran muy molestos y se notaba que eran buenos amigos.

-Hola soy James – dijo uno de los chicos. – él es Sirius – dijo señalando al chico que estaba a su lado – y ellos Remus y Peter – señalando al que estaba al lado de Natalia y al que estaba al lado del chico.

-Hola – dijo Remus mirando a Natali. Ella se sintió nerviosa, Remus parecía un chico muy dulce.

-Hola – dijo ella – soy Natalia y ellos son Lilly y Severus.

Siguieron hablando los 7 hasta llegar a Hogwarts, James y Severus se pelearon 9 veces hasta que llegaron, las chicas ya se habían cansado de eso. El lago le daba tanta paz, después se subieron a unos carruajes muy hermosos, Natalia casi se cae al subir, pero Remus la tomó prácticamente alzándola.

-Lo siento – dijo ella avergonzada.

-No hay problema, ¿estás bien? – dijo él colorado.

-Si gracias – dijo ella.

-Parece que a lunático le gustó su amiga – dijo James riendo. Remus bajó su cabeza avergonzado. Natalia lo miró y se puso muy colorada.

-Me parece que no es un buen comentario para realizar al frente de todos – dijo Lilly mirando muy seria a James.

Cuando entraron al gran salón comenzó la selección de casas, todos quedaron en Griffindor, excepto Severus Snape que quedó en Slytherin, Lilly y Natalia decidieron dormir en las camas que estaban al lado de la ventana así podrían hablar hasta tarde y hacer pijamadas.

Después de la cena, Severus vino a buscar a Lilly y Natalia le pidió que la acompañase. Fueron hacia la biblioteca, donde se emocionó al ver todos los libros. Su papá siempre había cultivado en ella el deseo por la lectura.

Mientras ella leía, Lilly y Snape se reían de algo que ella no había escuchado. Luego Lilly empezó a buscar un libro para llevarse, ya que Severus ya tenía los suyos. En ese momento, Snape miró a Natalia, había tomado los ejemplares más largos de la estantería y eran sobre química avanzada, física, hechizos, pociones y el otro sobre los fundadores de Hogwarts.

Le pareció interesante que leyera tanto y se emocionara tanto, solamente pensaba que a él le pasaba eso. Salió de su momento y volvió a centrar su mente en Lilly, le gustaba desde hacía 3 años y esperaba poder estar con ella en algún momento.

Severus las acompañó a su sala y ayudó a Natalia a cargar sus libros porque eran muy pesados y ella era muy chica como Lilly. Se despidieron en la puerta, con Natalia solo fue dándole la mano, a Lilly la abrazó. Volvió contento a su cuarto porque tenía su primer grupo en la escuela y por el abrazo a su chica preferida.

Cuando entraron las chicas, los merodeadores estaban allí sentados en la sala común.

-Vaya Remus tendrás que empezar a leer un poco más si quieres conquistarla – dijo James viendo la cantidad de libros que cargaba la chica. Remus ignoró su comentario y se paró a ayudarla.

-Gracias Remus – dijo Natali.

-Oye a mi amigo le gusta tu amiga – le dijo James a Lilly. – podríamos hacer citas dobles los cuatro.

-Ni lo sueñes – dijo Lilly.

-Algún día dirás que si en estos siete años – dijo James que se sentía victorioso.

Las chicas se fueron a dormir. Mientras hablaban se preguntaron varias cosas.

-¿Te parece lindo Remus? – le dijo Lilly emocionada.

-Es muy lindo – dijo Natali – parece muy dulce.

-Y gusta de ti por lo visto.

-¿A ti te gusta Severus?

-¡No! Es mi mejor amigo, nunca tuve otro tipo de sentimientos por él en serio.

-¿Y James?

Es lindo, pero tiene pinta de ser terrible. Ambas rieron con ese comentario y se fueron a dormir. 

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