Capítulo 18

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"Estaba en mi inventario sin que me diera cuenta".

Con eso, Jung Yiheon dijo que tan pronto como reconoció el elemento, apareció una ventana del sistema.

"Si mato a 800 más, la puerta quedará despejada".

Las puertas irregulares a veces tienen condiciones ocultas como ésta.

Jung Yiheon se dio unas palmaditas en el pecho aliviado.

Al mismo tiempo, Han Cha-soo se sintió aliviado de otra manera.

"Entonces podremos tratar con Geum Myeong-yeol sin preocuparnos".

Desde el ataque, Han Cha-soo había estado esperando este momento.

El Maestro del Gremio Exilis, Geum Myeong-yeol, había sido cauteloso desde que entró por la puerta.

“Heavenly Spirit Guildmaster, no te metas con su temperamento. A menos que quieras convertirte en un trozo de carne maldita quemada”.

"Está bien."

Si no se podía distinguir por la multitud de personas en el puente medio nevado, estaban dentro de la Puerta Irregular.

Ya estaba en problemas por meterme con el gremio de Jung Yiheon.

No tenía intención de empeorar las cosas y regresar a casa medio cadáver.

"Eres bueno en lo que te digo que hagas".

"Soy bueno en lo que no me pides que haga".

"Oye, estás hablando así otra vez".

Incluso mientras discutía con la malcriada secretaria, Geum Myeong-yeol no le quitaba los ojos de encima a Han Cha-soo.

Estaba a punto de preguntarle algo.

"¿Cayó algo después de la muerte del 'Imparable Toro de Hierro'?"

Jung Yiheon dejó escapar una exclamación de admiración al mismo tiempo.

"Para ser investigador, tienes una buena cabeza sobre tus hombros."

Como si eso no fuera suficiente, Jung Yiheon pronto sacó algo de su inventario.

"Si matamos a 800 más, podremos despejar la puerta".

Una puerta de algún tipo. Geum Myeong-yeol asintió y se preparó para volver a la batalla.

"800 en total."

Entonces, ¿qué hacemos después de matarlos a todos…?

'Supongo que tendremos que empezar con Jung Yiheon, ¿eh?'

Debajo de su cabello negro, sus ojos dorados estaban fríos mientras los miraba a los dos.

“Líder del gremio Exilis”.

Como esperándolo, Han Cha-soo se acercó a él.

Había terminado de hablar con Jung Yiheon y sostenía una botella de poción en la mano.

"Preferiría que me llamaras Maestro".

Geum Myeong-yeol parpadeó y luego sonrió.

"En Exilis, me llaman Maestro del Gremio, no Líder del Gremio".

A pesar del tono burlón, Han Cha-soo solo lo miró con ojos impasibles.

Su curiosidad fue despertada por la forma en que parecía no tener tiempo para él.

"Realmente no me tienes miedo".

¿Fue su personalidad o la presencia de Jung Yiheon lo que lo hizo tan audaz ante un intento de secuestrador?

Soy el malo, ¿puedo irme?Where stories live. Discover now