Soy el malo, ¿puedo irme?

Capítulo 62

Sabía que había entrado espléndidamente al centro médico. Tan pronto como abrí los ojos, estaba rodeado de gente y no pude evitar darme cuenta.

"Pero no me dijeron que tendría seguridad especial".

A diferencia del Hospital Yubaek, el centro médico pertenece a la oficina. No importa cuán influyentes sean Baekdam y Jung Yiheon, no pueden desplegar personal de seguridad para asuntos privados.

El viejo enemigo podría acercarse a mí en cualquier momento. Pero hasta ahora nunca se ha acercado.

Mi mirada se profundizó mientras miraba al aire.

Por qué.

¿No pudo o no pudo?

Intenté adivinar los pensamientos del oponente pero no logré resultados claros. Esto se debe a que falta información sobre la otra persona.

"Pero sí sé que hay una alta probabilidad de que sea de la oficina de seguridad... así que eso es un problema".

Un paciente externo que no es miembro de la oficina está desenterrando la información personal del personal de la oficina de seguridad. No importa lo bien que lo mires, serás sospechoso de ser un espía.

Profundicé en mi viejo enemigo y descarté el plan de matarlo. El riesgo es demasiado alto. Además, la otra persona nunca me ha amenazado todavía.

"Y, sobre todo, con este cuerpo es imposible".

Por ahora estoy con otra persona y observo la situación. Es una tontería actuar apresuradamente y ponerme en una situación peligrosa. Miré mi brazo pálido y organicé mis pensamientos.

Fue cuando.

“Mándame el organizado. Sí, no necesito las trivia… Sí, eso es suficiente. No reveles la lista todavía”.

Jung Yiheon se dio vuelta cuando terminó la llamada. La mirada que había estado flotando alto por un tiempo bajó como si estuviera pensando en algo. Bajo la sombra proyectada por largas pestañas, los ojos rojos se movían lentamente.

"Entonces te veo luego."

Él sonríe cuando nuestras miradas se encuentran. Le di unas palmaditas bruscas a la piedra espiritual con un pellizco. Jung Yiheon se acercó con pasos ligeros como una persona que escuchó buenas noticias.

"Tengo buenas noticias."

No me digas que me vas a conseguir otra piedra espiritual. Dije rápidamente,

"Este es suficiente para mí".

Jung Yiheon levantó las comisuras de la boca cuando lo dijo con ambas manos. Él asintió, acariciando ligeramente la pequeña piedra gris.

"Yo también lo creo".

Me puse más ansioso.

Si no es la piedra espiritual, ¿cuáles son las buenas noticias?

"I."

Antes de que pudiera hablar, Jung Yiheon abrió la boca primero.

“Esta vez llegaron algunos elementos que aumentan tu fuerza mental. No es tan efectivo porque es grado B…”

Parecía querer dármelo si no terminaba la frase. Hice una pausa por un momento y pregunté.

“¿Es algo que se subastará en el gremio?”

"Sí, aún no lo hemos anunciado".

"Si lo recibo con anticipación, ¿no sería un poco extraño?"

Los ojos de Jeong Yiheon se agrandaron y recuperaron su tamaño original. Con la cabeza ligeramente inclinada hacia un lado, parecía como si estuviera pensando en algo.