Quince: The Other Woman

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Tras la nula respuesta de Chaeyoung ante la petición de conquista que le dió Mina y el mensaje recibido por parte de Nayeon, nuevamente el mundo de la japonesa había caído al suelo

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Tras la nula respuesta de Chaeyoung ante la petición de conquista que le dió Mina y el mensaje recibido por parte de Nayeon, nuevamente el mundo de la japonesa había caído al suelo.

Ya no se sentía con fuerzas de seguir con aquel plan porque hasta el momento, nada de lo que intentaba estaba funcionando y su mente comenzaba a crear escenarios pesimistas en donde todo terminaba en ella volviendo a Corea, firmando el divorcio y quedando completamente sola mientras el amor de vida corría a los brazos de Tzuyu para ser feliz en una nueva vida sin ella.

Mina realmente ya no tenía ganas de seguir con el viaje que había planeado para Chaeyoung, sentía la necesidad de retornar al hotel y dejar que su amada esposa se viera con su novia, pero sabía que eso conllevaría a tener que decir la verdad acerca de su falso matrimonio y no se sentía preparada para enfrentar la decepción de su familia.

Aunque, en el fondo, sabía muy bien que ese día tenía que llegar tarde o temprano, a pesar de que sus esperanzas se mantuvieron altas cuando su hermana la invitó a aquella segunda luna de miel, ya todo se había ido al mismísimo carajo y comenzaba a pensar que simplemente debía rendirse y aceptar que jamás sería correspondida.

La chica de cabellos negros condujo en silencio hasta que llegaron a una cabaña ubicada en una zona privada. Esta era lujosa y muy hermosa, se encontraba a orillas de la playa y no había rastros de otras cabañas cercanas que pudieran molestar.

«Como si eso importara, la única persona que molesta aquí soy yo» pensó Mina estacionando el auto en la entrada de la cabaña.

– Este lugar es hermoso – comentó Chaeyoung maravillada – No tenías que preocuparte, Mina.

– No hay problema – respondió vagamente quitándose el cinturón y las llaves del auto – Toma, esta es la llave de la cabaña – le tendió una tarjeta a la más joven – Tú entra, yo voy a sacar las cosas del maletero.

Sin esperar una respuesta por parte de Chaeyoung, la japonesa bajó del auto y tomó una profunda respiración, deteniéndose un momento para ver el tranquilo mar. La vista sin dudas era hermosa, se volteó al escuchar la puerta del auto cerrarse y unos pasos alejándose, viendo cómo Chaeyoung subía las escaleras para entrar a la cabaña con una media sonrisa en el rostro.

– Al menos parece que le ha gustado – susurró y abrió el maletero para sacar las maletas con sus cosas.

Una vez que las maletas estuvieron afuera, cerró el maletero y se apoyó en el auto, sintiendo una fuerte opresión en el pecho y unas inmensas ganas de llorar cuando de repente su mente comenzó recordar todo lo que había pasado desde que Chaeyoung le dijo que Tzuyu y ella estaban en una relación.

En el momento en que supo, sintió como su hubiera recibido una bala directo al corazón. Fue en ese entonces donde pensó que jamás debió proponerle matrimonio a Chaeyoung ya que al final todo había salido en su contra.

"– Ella es Chou Tzuyu – le dijo Chaeyoung presentando a la taiwanesa una tarde de verano – Es mi novia, espero que la respetes de ahora en adelante."

Mina ni siquiera supo qué pensar en ese instante, porque ahora Tzuyu tenía el corazón de Chaeyoung y se sentía tan estúpida, asustada de perder todo lo que pensó que jamás perdería.

Su mundo entero se estaba desmoronando.

Las lágrimas comenzaron a fluir por su rostro y su mano fue a dar a su pecho, le era imposible soportar el dolor que estaba experimentando. Sentía que había sido golpeada por un dardo venenoso, la menor había sido un problema desde el principio... Tendría que haber huido de esos sentimientos, porque sabía que ella era la culpable por haberse enamorado como una idiota.

– ¿Por qué te enamoraste de ella? – susurró entre lágrimas, mirando hacia el mar en un intento de consuelo – Debiste creerme, ella no es la indicada... – bajó la cabeza – Ella nunca te amará como yo lo hago, no te abrazará como yo lo hago, no te conocerá como yo lo hago...

Se puso de rodillas ante su maleta y de un bolsillo sacó una carpeta junto a un lápiz. Se levantó nuevamente y apoyó la carpeta sobre el auto, abriéndola para dejar a la vista la petición de divorcio. La miró por unos momentos y el llanto junto al dolor se intensificaron.

– ¿Por qué te enamoraste de ella? – golpeó levemente la hoja de papel con la palma de su mano – Yo sólo quiero que esta mierda se terminé... Yo no dejaría que ella te ame como yo lo hago, te toque como yo quisiera hacerlo, nada como yo quisiera hacerlo... – sintió tu cuerpo temblar – Nada como yo lo hago.

Ya era tarde, era momento de asumir que ella fue, es y siempre será la otra mujer. La cual tiene tiempo de arreglar sus uñas y es perfecta donde su rival fracasa, por lamentablemente la fracasada era ella porque perdió en la competencia más importante.

Ella era la otra mujer, la chica adinerada y feliz, a la cual nunca se la verá con rizos en su cabello y en ninguna parte. Ella es la otra mujer... La cual siempre encanta su ropa con perfume francés de alta calidad porque quiere impresionar y tiene flores recién cortadas en cada habitación de su hogar porque sabe que a Chaeyoung le encanta.

Ella era la otra mujer, la que hacía de todo por tener al menos un porcentaje de cariño de aquella chica que le dió un sí y le juro un falso amor eterno ante un juez. Ella nunca dejaba objetos en el suelo porque sabía que a Chaeyoung le molestaba y cuando llegaba del trabajo abría la puerta con emoción de tan sólo poder ver los ojos de la coreana, aunque estos siempre la despreciaran y rechazaran.

Mina sufría en silencio, pero era feliz de tener a Chaeyoung a su lado aunque sea por un matrimonio político... Mina seguía sintiéndose orgullosa de llamarla su esposa a pesar de todo. Ella siempre esperaba como una reina solitaria los fines de semana a que la coreana llegara de alguna cita con Tzuyu... Le dolía, pero era feliz sabiendo que al final de la jornada la menor volvería a casa con ella, porque estar a su lado es un gran cambio de rutina.

Pero... Mina es la otra mujer, la cual siempre llorará hasta quedarse dormida. Mina es la otra mujer, la cual sabe que nunca tendrá el amor de Chaeyoung y si no tomaba una decisión, los años iban a pasar y ella pasaría su vida entera sufriendo sola.

– Es tiempo de dejarte ir – murmuró limpiando sus lágrimas y tomó el lápiz – Es tiempo de decirte adiós, ya no quiero ser la otra mujer – sentenció y firmó los papeles de divorcio de una vez por todas...

Sin saber que desde arriba, parada en la puerta de la cabaña una Chaeyoung hecha trizas había visto todo.

Sin saber que desde arriba, parada en la puerta de la cabaña una Chaeyoung hecha trizas había visto todo

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FAKE WIFE || MiChaeng Donde viven las historias. Descúbrelo ahora