Antes del Cielo [Wattys 2024]

Capítulo 57

—¿¡Que!? ¡NO! ¡Ah! ¡Ayuda!

Y empecé a perseguirlo por el patio.

Cabe destacar que mi hermano tiene las piernas mas largas, fuertes y atléticas, que yo.

No obstante, no me rendí y seguí persiguiéndolo, con la esperanza de poder propinarle un buen puñetazo.

Y a pesar de que él era dos veces mas rápido que yo... Siguió huyendo y gritando como niña pequeña.

—Se lo dije —dijo Andrew,  encogiéndose de hombros y tomando asiento con el resto de los otros—. ¡Mamá, el desayuno!

En total, perseguí a mi hermano por un tiempo de dos minutos.

Al final logré darle el golpe que quería, pero debió dolerle mas la caída que el golpe sin aliento que yo le di.

Se cayó tratando de saltar la cerca para huir.

Cuando llegué a su lado ya no tenía ánimos para pegarle.

Así que sólo me limité a patearlo y cuando creí que iba a caerme del cansancio, sentí unos brazos rodearme y levantarme antes de que me terminaran de ceder las rodillas.

Ashton.

—¿Satisfecha? —Preguntó, depositándome delicadamente en una silla.

Me cargó hasta allí como si fuese una niña pequeña.

Y mi corazón seguía latiendo como loco.

Pero eso se debía a la difícil tarea de haber tenido que correr detrás de mi niña hermano, que seguía tirado en el suelo, a un lado de la cerca.

Y como sospeché desde un principio, no llevaba pantalones debajo de aquella túnica.

Estaba patas arriba con las piernas descubiertas.

Si, señores, con eso comparto sangre.

Un gruñido, parecido al de un gato... Pero menos adorable, en realidad parecía el de un animal convulsionando, me hizo voltear la cara.

La chica, nuestra vecina, miraba a Ashton y mordía su labio.

Él sólo le sonrió, pero fue suficiente para sentir cómo una oleada de calor me recorría entera.

Involuntariamente entrecerré los ojos en dirección a la vecina.

Que bueno que nadie más lo noto.

—Que fuerte eres, Ashton —dijo, con una voz exageradamente aguda. Y volvió a ronronear. Así que el sonido de animal moribundo lo estaba haciendo ella.

Ashton le sonrió otra vez y me contuve para no hacer ningún comentario inapropiado.

Además, no se me olvidaba que esa chica, sea mi vecina, la conociera a no, había participado en las locuras de mi hermano y su rapto improvisado.

Me aclaré la garganta exageradamente y Ashton regresó su atención a mí.

Mucho mejor.

—Bueno —dije, cruzándome de brazos—. Espero una disculpa —los miré a todos de hito en hito, indignada.

—Bueno —el primero en ceder fue Ash—. Supongo que debo comenzar yo. —Tomó mi mano y le dio un cálido beso en el dorso. Ay, me derrito—. Lo siento, nena

¡Dios, me derrito, me derrito!

Una corriente me recorrió, pero hice un esfuerzo para que no se me notara. Me aclaré la garganta con seriedad.

Ya gritaré de emoción, en mi cuarto, más tarde.

—Pues yo sólo hice lo que Will me ordenó, arréglate con él —Andrew se encogió de hombros, bebiendo del vaso con jugo de naranja, que su madre había traído.