Capítulo 85

9 0 0
                                    

. . .

Punto 28: colarme dentro de una sala de cine.

Admito que cuando lo coloqué en mi lista, a los doce años, la idea me pareció excitante.

Tenía doce, quizá menos y era algo emocionante en su momento, tanto como hacer una travesura en la escuela.

Pero ahora que estamos aquí ya no me parece tan buena idea.

Pero debo dejar las cosas fluir.

Todo estará bien.

Además, esta es la cosa más tranquila que haremos hasta ahora de toda mi boba lista.

Mi ángel de los deseos prometió hacerse cargo de todo.

—No hay nadie en la puerta —me mira de soslayo, preguntándome sólo con sus ojos.

—Hay que hacerlo —digo y su boca se curva en una de esas perfectas sonrisas ladeadas. Mi interior burbujeo extasiado, me armo de valor y esta vez soy yo quien nos lleva dentro.

Ashton abre la puerta para mí y mirando a cada lado, entramos.

—Bueno, no fue tan difícil —se quejó mi chico, en cuanto tomamos asiento, él esperaba un poco más de adrenalina—. Entonces, ten tus palomitas, nena.

Casualmente también conseguimos dos asientos contiguos.

 Esto fue demasiado fácil.

Pero decido no darle más vueltas y me acomodo en mi asiento lo mejor que puedo. Estoy emocionada.

La sala está llena a rebosar, no hay ni un solo asiento vacío a excepción de los que tomamos.

Bueno, es el final de los vengadores.

 Más de uno va a salir de esta sala e irá a cortarse las venas, lo percibo. Otros iremos a terapia.

Miro a Ash y él me sonríe feliz y me besa.

 Su lengua acaricia mi labio inferior y todo dentro de mí tiembla.

—Ah, disculpen —nos separamos rápidamente.

Una mujer bajita, junto con un hombre un poco más joven que ella, nos mira con una ceja arqueada.

—¿Si? —Mi cómplice de coladas se mete un puñado de palomitas a la boca y observa sin interés alguno a la mujer. Ella frunce el ceño y se lleva ambas manos a la cadera.

—Están en nuestro lugar —ahora luce molesta. El hombre le coloca una mano en su hombro y nos mira.

—No, no es verdad. —Interviene mi Crush. Mi hermoso y perfecto Crush. Ah, no, esperen, mi novio…—. Nosotros vamos aquí —le doy un codazo, será mejor que se calle

Antes del Cielo [Wattys 2024]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora