a orillas del mar

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Estaba entrando en pánico hasta que vi el pecho de Peeta moverse de arriba a abajo, Finnick se puso a un lado cansado y yo me subí encima de Peeta

-cuidado, hay un campo de fuerza ahí- sonrió

-Peeta! Peeta... estabas muerto... tu corazón no latía

-tranquila, esta funcionando ahora

Lo iba a besar, pero estaba tan asustada que solo lo abraze con todas mis fuerzas desesperada

-Estela?- dijo preocupado

-Esta bien, asustada nada más, tardaste en respirar y además, las hormonas y el bebé...

Peeta le asintió a Finnick que estaba arrodillado al lado de Mags a unos pocos metros de nosotros.

-crees que puedes caminar?- Le preguntó Finnick a Peeta

-debe descansar- completé

Finnick asintió y caminamos lento unos kilómetros, yo iba adelante tirando bayas para ver donde había campos de fuerza, encontramos un buen lugar y decidimos descansar un rato

Yo fui a cazar mientras que Peeta, Finnick y Mags armaban un refugio con hojas grandes, era difícil Cazar con hachas, estas estaban más pesadas de lo normal, y no quería gastar los cuchillos, solo encontré 4 ratas de árbol, Peeta sugirió que las cocinemos con el campo de fuerza, comimos y arreglamos para hacer turnos de a dos, Primero yo y Finnick y luego yo y Peeta, cuando Peeta y Mags ya estaban dormidos me quede hablando con Finnick

-te cuento algo Finnick?

-sobre que?

-es sobre mi bebé

-le pasó algo?

-no, de hecho, era falso

-que? No estas embarazada? Pero tu barriga, la entrevista... es todo falso?

-según lo era, era un plan para que detuvieran los juegos

-yo quería ser padrino...- me reí

-eso no es todo

-que más?

-hace meses me eh sentido mal, así que antes de venir me hize estudios, y resulta que si estoy embarazada

-como?

-así como lo oyes

-wow... Peeta lo sabe?

-sí, pero no puedo dejar de pensar, el bebé es de Peeta así que quiero que sobreviva, pero si yo gano, Peeta muere, y no voy a permitir eso

Finnick solo suspiro antes de que el sello del capitolio iluminará en el cielo, 8 muertos, bastantes, terminan de pasar y veo como un pequeño paracaídas cae el el piso a unos metros, Finnick me lo señala y voy corriendo a tomarlo, el ruido del mismo despertó a Peeta y Mags, se lo di a Finnick para que lo abriera y cuando lo hizo puso una mueca confundida, se lo pasaron entre todos y ninguno sabía que era.

-quizas Estela sepa- Finnick me extendió el pequeño trozo de metal con una carta, era de Haymitch, examine el artefacto y lo recordé

-una espita!

Todos me miraron confundidos

-nunca tuvieron una de niños?

Todos negaron con la cabeza, volteé los ojos y la clavé en el árbol en el que estaba recostada mi espalda, de la espita empezó a salir agua, rápidamente abrí la boca y empeze a tomar desesperada el agua, depues de mi, tomo Peeta, Finnick y por último Mags, miré al cielo buscando una cámara e hize un corazón con las manos, Finnick me miró extrañado

Peeta Mellark, Mi Compañero Tributo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora