Bajo sus Encantos

I. Servicios

N1: Se acuerdan que les dije que la pequeña historia de Santa's  Little Helper, bueno esta historia si es más larga, así que esperare que les guste, si han leído La Causa Perfecta, sino, les recomiendo que vayan a leerla, es de la misma autora, así que denle amor, la verdad es es una de mis favoritas.

Déjenme sus comentarios de lo que esperan de esta historia, o se imagina como ira, o que pasara.

-....

Con este pase, tienes vía libre y gratuita a uno de los servicios especiales de Rebecca Patricia Armstrong. Y por vía libre y gratuita debes entender que no te cobraré, es gratis.

¡Feliz cumpleaños! Freen

Y había una pequeña estrella dorada al pie de la carta.

Freen alzó la vista del papel y miró a su amiga, que le sonreía emocionada con pequeños saltos.

- ¿Qué demonios es esto Mind? - susurró. Sí, bueno, conocía eso de "el servicio especial" de Becky y del que algunas chicas ya habían pasado. Pero Armstrong estaba muy equivocada si pretendía que ella cayera también.

- Mi regalo de cumpleaños- rodó los ojos. Ella odiaba ese día ¡detestaba festejar su cumpleaños! Y las personas más cercanas lo sabían, y Mind era una de ellas - que lo disfrutes- le palmeó el hombro, como si hablara realmente en serio y la vio perderse dentro del salón.

Abolló la tarjeta y apretó los dientes. Iba a mandar al diablo esa clase de matemáticas e ir en busca de la causante de todos sus enojos diarios cuando la señora Monroe se acercó y, con una seña, le ordenó que ingresara. Ah, pero apenas tocara la campana iría directo a Armstrong.

Y la mataría.

Ella no iba a ser otra más de las que iba a la casa del conejo ese y se sometía a sabrá Dios qué cosas pasaban allí dentro. Bajo la excusa de sus servicios especiales, un trabajo raro y algo secreto para la mayoría.

Avanzó directo a su lugar y lo ocupó con furia. Más le valía a Armstrong haber asistido a clases ese día porque matarla en su casa, bajo la mirada de sus padres, no entraba en sus planes.

- "...With a taste of your lips, I'm on a ride. You're toxic, I'm slippin' under. With a taste of a poison paradise. I'm addicted to you. Don't you know that you're toxic? And I love what you do. Don't you know that you're toxic?..."

Oh, ¡por supuesto! ¿Dónde más iba a estar? En el salón de baila. Si practicando una y otra vez sus pasos de baile Y para su mala suerte esa canción que hacía sangrar sus oídos ¿Cuándo iba a ser el día en que Becky entendiera que eso del amor era una completa y total estupidez? Sin contar la falta de tiempo, por supuesto.

Avanzó sin miedos y llegó a ella, golpeando su pie contra el piso repetidas veces para llamar su atención.

- ¿Quién demonios te has creído Armstrong eh? - la encaró lanzándole el sobre contra el piano. Becky parecía confusa, con sus cejas arqueadas y observándola como si hubiese interrumpido su discurso a un premio DWC-

- ¿Me has hablado a mí? -

- ¿Acaso hay otra Armstrong aquí dentro? -

- No. Pero tú nunca me hablas y....-

- Entonces no vamos a salirnos de la costumbre ¿puedo saber por qué demonios le has dado esto a Mind? - ni siquiera esperó a que la abriera el sobre. Ella lo hizo y de una manera no tan considerada. Rasgó el papel y leyó en voz alta lo que la carta decía - ¿Quién te ha dicho a ti que quiero uno de tus estúpidos servicios? –

- Freen, no comiences con tus ofensas. No son estúpidos y yo no le di nada a tu amiga- volvió a lo de seguir con sus pasos, ella fue y la empujó de una manera bastante violenta. Un segundo antes y hubiese visto como la chica se estampaba contra la dura pared-