Ella lo abrazó y yo no pude evitar llorar, no sabía si era de alegría por él, o de alivio porque se había acabado. Quizá ambas. Thomas me mantenía en sus brazos.
–No quiero ser grosero–dijo él, haciendo que Cedric y su madre se girarán, Cedric al verme camino hacia mí y yo hacia él abrazándolo desesperadamente–Pero entenderás que es necesario que hagas un juramento argumentando que dejarás todo esto
Miré a Eos, ella asintió, se colocó en medio de la sala de nuevo, mirando a Cedric y él a ella mientas aun me abrazaba.
–Juro...por el Cosmos, por mis hijos y por mí, que desde hoy no volveré a mis planes de venganza, serviré de nuevo al Cosmos y me dedicaré a mis hijos en todos los sentidos, seré su madre y sobre todo su guía, confiando en que con el tiempo ellos puedan perdonar mis acciones, si Helios ha de morir será en manos de quien el Comos decida, ayudaré a los mestizos creados a volver con sus familias y en cualquier otra cosa que les pueda servir, si no cumplo con esto que el Comos se lo cobré con mi vida
Había terminado, en definitiva había terminado, el ambiente se tornó diferente, me sentí menos pesada y al mismo tiempo cansada. Thomas se apresuró hacia Eos.
–Es hora de que hagas un anuncio a tus compañeros
–Cuanto antes mejor
Juntos salieron.
–Esto es tan...todo paso tan...como es...tu solo...–Leo no podía completar ni una oración–O por el cosmos Alice, Cedric
Corrió a abrazarme y luego como señal de cariño despeino a Cedric–No puedo creer lo que acaba de suceder por el cosmos eso fue...
–Ya Leonard
–Theodore
Theo me miró, camine un poco hacia él para poder abrazarlo.
–Me alegro que estés bien Ali–me soltó–Ambos, que bueno que estén bien ambos
–Gracias–le dijo Cedric
–Vamos Theo, hay que ir a dar la buena nueva a los demás
Leo y el salieron sin decir más. Me giré para mirar a Cedric quien me miraba sonriente.
–Lo hiciste–dije con emoción–Nos salvaste a todos
–No hice nada, quizá un poco–me abrazo de nuevo y se puso serio–Me dio mucho miedo cuando te fuiste, me dio miedo no volver a verte y la sola idea me enfermaba, luego cuando ella te amenazó
–Fuiste muy valiente ¿Lo sabes verdad?
–Por ti lo fui, Alice te amo
–Te amo Cedric, mucho y yo también tuve miedo de perderte...otra vez
Las lágrimas cayeron de mi rostro y de inmediato él las limpió.
–Vamos a casa ¿Si?–le pedí
Él asintió y juntos salimos de ahí.
Cuando llegamos a la mansión fuimos recibidos por los que se quedaron ahí, sobre todo Emma, quien ya había recuperado su memoria y estaba feliz de verme. Ámbar, quién ya había crecido más en el poco tiempo que había estado fuera también me recibió contenta. Se la entregué a Emma después para poder irme a mi habitación.
–¿Quieres acompañarme?
–Por supuesto que si Cielo
Estar en mi habitación me provocaba un extraño sentimiento, la última vez que estuve ahí fui secuestrada por mi suegra ex–vengativa.