Nueva Vida

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-Espera, que? - pregunto Lucy gray levantándose de inmediato de Coriolanus.
-Si, la doctora Gaul abogó por mi, ante la mesa directiva y me perdonaron por lo sucedido en los juegos.
Me ofrecieron una enorme oportunidad laboral! No es increíble?? - preguntaba Coriolanus abrazando a Lucy gray, mientras ella estaba en shock.

Tan pronto Coriolanus la soltó, ella se levantó y buscó su ropa interior.
-A dónde vas? - pregunto Coriolanus mirándola ponerse su ropa.
-Al baño. - dijo Lucy gray desesperada por huir por un momento.
-Bien, entonces me vestiré y vamos a preparar algo para cenar, si? - preguntó Coriolanus.

-Si claro, entonces dejame entrar al baño, y ponerme algo de ropa. - dijo Lucy gray encerrandose en el baño.
Donde se sentó en el suelo frío sin importarle estar en ropa interior.

Estaba confundida y dolida.
Llevaban apenas dos días, y ya regresarian al capitolio.
El corazón le cayó sobre los pies, ya que al llegar al capitolio, ella y Coriolanus estarían separados por no estar legalmente casados allá.

Todo había sido un sueño.

Salió del baño y fue a ponerse el vestido que traía puesto.
Ni siquiera recordaba en donde lo había dejado, pero lo encontró en la salita, donde Coriolanus estaba sentado.
-Hasta aquí estaba mi vestido? - pregunto Lucy gray, mientras Coriolanus y ella se reían.
-Lo siento, pero al menos ahora no lo rompí. - dijo Coriolanus bromeando.

Después de haberse vestido fueron a la cocina a prepara algo de comer, decidieron hacer pastel de carne, Coriolanus partía las verduras, mientras Lucy gray freía la carne.
Todo estaba en paz, pero la mente de Lucy gray la atormentaba de ansiedad al no saber que pasaría en el capitolio, ni cuando se irían.
Estuvo batallando por un buen rato, hasta que no aguanto más.

-Cuando nos vamos? - soltó Lucy gray afectada.
-A donde mi amor? - pregunto Coriolanus dejando de picar cebollas.
-Al capitolio. - dijo Lucy gray jugando con sus manos.
-Mañana por la noche. - dijo Coriolanus serio.
-Pasa algo mas, Lucy gray? - pregunto Coriolanus acercándose a ella.

-No quiero irme Coriolanus... Esté lugar es hermoso... Aquí estamos casados y podemos hacer lo que queremos, pero allá no será asi. - dijo Lucy gray buscando la mirada de Coriolanus.
-Pues igual nos casaremos allá. - dijo él sin darle mucha importancia.
-No, mírame! - dijo Lucy gray volteandole el rostro a Coriolanus.
-No entiendes! Necesito ver a mi familia! Ellas están muy mal, no puedo dejar de pensar en ellas.
En que mientras yo disfruto de ti, ellas están muriendo de hambre. - dijo Coriolanus.

-Eso lo entiendo a la perfección, Coriolanus. Yo también dejé a mi familia. -
-Ahora yo soy tu familia! - dijo Coriolanus.
-Entonces yo también soy tu familia!! - grito Lucy gray.
-Es diferente, Lucy gray. Tu familia sabe como ganar dinero y todos trabajan... Pero en mi familia solo mi prima trabaja, y viven del sueldo bajisimo de Tigris. - dijo Coriolanus calmando a Lucy gray.

-Y, ¿en que beneficiará que yo vaya contigo? Creo que será mejor que yo vuelva al doce. - dijo Lucy gray deseando salir de inmediato de la cocina, pero Coriolanus la tomó de la mano.
-No digas eso, tu ya eres mi esposa. - dijo Coriolanus.

-Podemos hacerlo funcionar Coriolanus, te mandaré cartas, y puedes visitarme cuando quieras. - dijo Lucy gray mientras Coriolanus negaba firmemente con la cabeza.
-No. Nunca funcionará así, Lucy gray. - dijo Coriolanus.
-¿Porque crees eso? - pregunto Lucy gray.
-Porque necesito a mi lado... Extrañaria demasiado tus amores, tus caricias, tus abrazos, tu olor, tu voz... Tu piel.
Pero lo mas importante, te necesito para aconsejarme cuando estoy haciendo algo mal. - dijo Coriolanus.

-¿Y crees que yo no? Pero eso es exactamente lo que siento que nos ocurrirá en el capitolio. Dime, en donde vamos a vivir? -
-En mi casa claro. - dijo Coriolanus.
-Tu abuela me odia. - dijo Lucy gray mientras Coriolanus la abrazaba.
-No conoce tus encantos. - dijo Coriolanus besándola en el cuello.

-Ella piensa que si. - dijo Lucy gray cerrando los ojos del placer de los besos de Coriolanus.
-Demostremosle que tu no eres lo que todos creen que eres. -
-Será difícil. - dijo Lucy gray.
-Nadie se resiste a tus encantos, mi amor - dijo Coriolanus, mientras Lucy gray se giraba para verlo a los ojos, y se estiraba para abrazarlo por el cuello.

-Extrañare tu calidez en la noche. - dijo Lucy gray besándolo tiernamente.
-Aún no sabemos si mi abuela nos separará para dormir. - dijo Coriolanus volviendo a besar el cuello de Lucy gray.
-Estoy segura de que si. - dijo Lucy gray suspirando.

-Bien, entonces haré que valga la pena ... - dijo Coriolanus besándola profundamente.
-ah si? - pregunto Lucy gray con una sonrisa.
-Ya verás. - dijo Coriolanus apagando la estufa, haciendo reír a carcajadas a Lucy gray.
-No era que tenias hambre? - pregunto Lucy gray mientras Coriolanus la subía a la barra de la cocina.
-El hambre puede esperar... Ahora quiero disfrutar de tus delicias. - dijo Coriolanus acercándose a besar a Lucy gray, robandole el aliento.

-Aquí no. - decía Lucy gray susurrando entre besos, sujetandose bien a la barra, mientras se recargaba en la alacena.
-Porque no? - pregunto Coriolanus impidiendole el habla a Lucy gray con tantos besos, haciendola suspirar .
-sabes que? Al diablo... Haz lo que quieras. - dijo Lucy gray riéndose a carcajadas mientras Coriolanus se desabrochaba la camisa de nuevo.

Coriolanus le impedía a Lucy gray hacer ruidos, callandola a besos.
Aunque a veces no podía refrenarlos.
Entonces los dos agradecían al cielo qué las paredes fueran tan gruesas qué no se escuchaba nada.
Ya que Coriolanus estaba cumpliendo lo que le había dicho a Lucy gray, dejando marcas de su paso sobre sus pechos y abdomen.
Terminaron dormidos en el suelo de la cocina.

-Te excediste mi amor. - dijo Lucy gray al día siguiente mientras se miraba frente al espejo de su recámara.
-Lo siento. - dijo Coriolanus sintiendo lastima por su esposa.
-No te preocupes, se borraran pronto. - dijo Lucy gray cambiándose rápidamente poniendose una linda falda y una blusa corta.

El tren salía en dos horas, y tenían que estar una hora antes

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El tren salía en dos horas, y tenían que estar una hora antes.

Coriolanus subió sus maletas al auto, mientras Lucy gray fue a despedirse de la señora Bell, quien había sido tan amable con ella.

-Fue un verdadero placer conocerte niña, cuidate mucho... Y también a ese esposo tuyo. - dijo la anciana dandole un cariñoso apretón de manos.
-El gusto fue mio, señora Bell. - dijo Lucy gray despidiéndose de ella y caminando con Coriolanus.

Coriolanus arrancó el auto, y se fueron directo a la estación del tren.

En la estación entregaron el auto, se despidieron del comandate, y subieron al tren.

-Estas lista? - pregunto Coriolanus mirando a los ojos a Lucy gray.
-No, pero lo intentaré. - dijo Lucy gray mirando por la ventana.





Holaa, aquí les dejo un nuevo capitulo! Tenganme paciencia con mis otros fanfics jaajaja, porque aún los estoy editando, pero les prometo que pronto tendrán mas capítulos,
Recuerden votar y comentar si les gustó el capitulo, los quiero mucho mis pastelitos de nata! 💗✨🥮

una nueva vida junto a tiTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang