Fin

104 5 20
                                    

-¿Que hace aquí, presidente Snow? - pregunto Lucy gray bajando la mirada.

Le dolia el mero hecho de mirarlo.

-Lucy gray, para ti no soy el presidente... Solo Coriolanus. - dijo Coriolanus mirándola igual de dolido.
-No, esta bien, señor presidente. - dijo Lucy gray sería.

-Bien... -
-Que haces aqui? - pregunto Lucy gray incomoda.
-Te... Traje algunas cosas. - dijo Coriolanus mostrándole unas cajas detrás de él.
-Quién te dijo que estaba aquí. -
-Mi dueña... La doctora Gaul.
Tenias razón con lo de la marioneta. - dijo Coriolanus.
-Ojalá te hubieras dado cuenta antes de empeorar los juegos. - dijo Lucy gray.

-Esto no es sobre los juegos del hambre, Lucy gray. - dijo Coriolanus.
-Y que es eso? - pregunto Lucy gray señalando las cajas detrás de Coriolanus.
Tenia miedo de acercarse a él porque sabía que su fuerza de voluntad no ayudaría.

-Te traje ropa del... Del bebé, y algunas cosas más que olvidaste.
La abuelatriz falleció, y me pidió que te trajera esto. - dijo Coriolanus.
-Lo sé... La vi antes de que muriera. - dijo Lucy gray con un nudo en la garganta.

-¿Fuiste al capitolio? - pregunto Coriolanus sorprendido.
-Solo fueron unas horas y nadie me vio.- dijo Lucy gray.
-Bien, entonces te dejó esto. - dijo Coriolanus mirándola.
-Gracias. - dijo Lucy gray jugando con sus manos.

-¿Podemos hablar de lo que pasó? - pregunto Coriolanus impaciente.
-¿Y de que sería? - pregunto Lucy gray.
-No lo sé... Para empezar dime porque aceptaste el dinero de la doctora Gaul prometiendo jamás volver conmigo? - pregunto Coriolanus dolido.

-Bueno, al parecer rompí la promesa. - dijo Lucy gray.
-Todos lo hicimos... Tu prometiste nunca dejarme, y miranos, hablando un problema quince maldito años después.- dijo Coriolanus.

-Tu tampoco cumpliste tu promesa... Estamos a mano. - dijo Lucy gray.
-Me vendiste. - dijo Coriolanus mirándola dolido.

-Y tu me abandonaste por poder.
Yo soñaba con que tu eras mi mundo, y tu soñabas que yo estaba a pesar de que yo no era tu mundo. - dijo Lucy gray.
-Lo siento mucho, Lucy gray. - dijo Coriolanus.
-Estas perdonado desde hace años. - dijo Lucy gray.
-Gracias. - dijo Coriolanus.

-Pero... ¿No pudiste esperarme unos minutos más para que te aclarara las cosas? TE AMABA MUCHO COMO PARA DARME POR VENCIDO POR NOSOTROS.¿CÓMO TE ATREVISTE A IRTE SIN ESCUCHARME? QUERÍAS UNA MALDITA RESPUESTA, NO? PERO TE FUISTE ANTES DE QUE PUDIERA DECIR ALGO.
LO SENTÍ CUANDO TE BESÉ Y NO ME CORRESPONDISTE, ESE FUE NUESTRO ÚLTIMO MALDITO BESO. - dijo Coriolanus haciendola llorar.

-YA LO SE! QUIERES QUE TE DIGA QUE ME ARREPIENTO HASTA LA MUERTE? PUES LO HAGO! - grito Lucy gray entre lágrimas.
-Entonces porque no hiciste nada para volver conmigo? - pregunto Coriolanus.
-Porque es demasiado tarde, Coriolanus- dijo Lucy gray.

-Tenemos sueños muy diferentes, TU TIENES UNA FAMILIA CON UN HIJO... Y ESTA ES MI VIDA. - dijo Lucy gray.
-Contigo también comparto un hijo, Lucy gray. - dijo Coriolanus, entonces se acercó, y le levantó la blusa notando su cicatriz.

Aún recordaba perfectamente en donde estaba.

-También siento mucho que no te presté atención esa última noche hasta que me rogaste. - dijo Coriolanus bajando la cabeza, aguantando las lágrimas.
-Cuando te rogué qué me hicieras el amor? - pregunto Lucy gray.
-Creo que ahí fue donde comencé a darme cuenta de que sería hora de irme.- dijo Lucy gray.

-Entonces te rendirás? - pregunto Coriolanus levantando la cabeza con lagrimas.
-Es lo mejor. - dijo Lucy gray obligandose a hablar.

Coriolanus la miró fijamente a los ojos por un momento.

-Entonces mi viaje fue en vano. - dijo Coriolanus sonriendo con lágrimas corriendo por sus mejillas, cosa que quebraba a Lucy gray.

-Lo siento, presidente Snow. - dijo Lucy gray.
-Si, yo también lo siento mucho, Lucy gray baird... Amor mio. - dijo Coriolanus tocando su rostro vacilante.
Lucy Gray se alejó de su toque lentamente.

-¿Puedo besarte? - pregunto Coriolanus con voz temblorosa a causa de las lágrimas.
Lucy Gray levantó la vista con los ojos cristalizados y asintió, mirando los labios de Coriolanus.

Coriolanus se acercó lentamente a ella, la tomó del rostro y pegó sus labios a los de Lucy gray.
Empapadose ambos de lágrimas.

Fue un beso lento y delicado, pero lleno de nostálgia.

-Adiós. - dijo Coriolanus alejándose de ella.
-Adiós. - dijo Lucy gray mirandolo alejarse.
Y en cuanto estuvo lejos, Lucy gray se dejó caer en el suelo, para llorar desgarradoramente.

Casi escuchaba también la voz de la abuelatriz.

~adiós niña ~

Y de pronto la frase que la doctora Gaul le había dicho a Coriolanus cobró sentido.

"Son las cosas que más amamos las que nos destruyen"

una nueva vida junto a tiWhere stories live. Discover now