Hospital

56 5 1
                                    

CONTENIDO DELICADO, NO LO LEAS SI ERES SENSIBLE 🔞

-Y que dice ella? - pregunto Coriolanus.
-Le dije que ella no está consciente en este momento. - dijo la doctora.
-Señor Snow... Ella nos dejó muy en claro en la cirugía que ella no se daría por vencida. - dijo el doctor.

-No, pero deben de pensar en lo que es mejor para ella. - dijo la doctora.
-Si ella no quiere no la pueden obligar, doctora... Después de todo es la vencedora de los juegos del hambre del año pasado, ya no debe temerle a nada.- dijo el doctor.
-Váyase de aquí por favor, necesito hablar con la familia. - dijo la doctora molesta.

-Mi respuesta es no, si mi esposa no quiere operarse no lo hará, entonces no, no la operen.
Yo no firmaré nada. - dijo Coriolanus.
-No sea tonto! Tiene que pensar en lo que es mejor para esa niña. - dijo la doctora.
-Ya le dijo que no. - dijo el doctor.
-Bien, hagan lo que quieran, pero se arrepentirá de esto, señor Snow. - dijo la doctora alejándose de ellos ardiendo en ira.

-Lo siento, ella es así... Pero aún es de las mejores doctoras que hay, entonces no se le puede decir algo. - dijo el doctor.
-Muchas gracias doctor. - dijo Tigris.
-No es nada... Fue un placer. - dijo el doctor alejándose de ellos.

                        ~🖤~

Lucy Gray despertó después de dos horas de estar totalmente inconsciente.
Recordaba vagamente la operación, y también que durante un tiempo estuvo desvariando, pero sus recuerdos aún eran borrosos.

Miró a la blanca habitación, y se vio los brazos, llenos de agujas, sueros y quien sabe que otras cosas.
Se movió un poco y un horrible dolor de cabeza y le dolia demasiado desde el abdomen hasta las piernas.
Era un dolor tan penetrante que se volvió a desmayar de inmediato.
Y nuevamente, después de tres horas despertó, pero hora solo estaba conectada a una máquina y un suero en el brazo.

Giró un poco su cabeza que aun dolia, pero ya nada comparado a lo que había sentido la primera vez que se despertó.
A su lado, en una mesita había un ramo de rosas blancas.

Coriolanus había estado ahí.

Se inclinó para tomar las rosas y las olió.
Estaba en eso, cuando Coriolanus entró a la habitación.
-Lucy gray! - dijo él entrando rápidamente a la habitación.
-¿Cómo estas? Te duele algo? - le pregunto él.
-Me duele allá abajo, pero supongo que eso es normal.
Pero recuerda decirme hola. - dijo Lucy gray dándole un besito a Coriolanus.

-Los doctores dicen que les diste batalla.- dijo Coriolanus tomando su manto.
-No estoy hecha de azúcar cariño, y tu lo sabes. - dijo Lucy gray sentándose con ayuda de Coriolanus.
-Una doctora quería operarte. - dijo Coriolanus.

-Me imagine que te lo preguntarian.
Les dijiste que no? - pregunto Lucy gray.
-Quieres que les diga que si? - pregunto Coriolanus levantándose.
-No! Claro que no. - dijo Lucy gray tomándolo de la mano.
-Cree en mi cuando te digo que si podré lograrlo algun día. - dijo Lucy gray decidida.
-Bien, entonces la próxima vez estará todo planeado. - dijo Coriolanus.

-¿Quieres comer? - pregunto Coriolanus.
-Si eso dices. - dijo Lucy gray bajando la cabeza.
Coriolanus le pidió comida, y le ayudó a comer ya que ella seguia muy débil.
Lucy Gray lloraba de la nada, y volvia a decirle que lo lograría.

Lloraba y lloraba, o tan solo tenía la mirada perdida.

Al dia siguiente el doctor les dijo que tenía que empezar a intentar caminar, para que comenzará a tener fuerza en las piernas y para saber si la inyección no le había afectado la espina dorsal.
-Sujetela bien de la cintura y que ella se sostenga de la andadera. - le decía el doctor, mientras Lucy gray se ponía su bata de dormir.

una nueva vida junto a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora