— ¿Volverás tarde? — Aleksander mira por encima de su hombro.
— El cargamento a Suiza debe enviarse esta noche. Debo revisar que la mercancía no tenga problema. — Jayden asintió y se quedó en silencio.
El Albino sabía que su omega odiaba cuando debía irse. No por la clase de negocios, sino, por la simple posibilidad de que podría morir. Aleksander término de abotonar su camisa para acercarse a su omega.
Dejó pequeños besos sobre los hombros descubiertos de su omega, como lo estaba todo su cuerpo, cubierto de sus marcas, señales de lo que habían hecho hace tan solo unas horas.
— Ten cuidado — pidió el omega mirando al alfa. El albino sonrió y lo beso.
Fue un beso intenso. Jayden puso sus brazos en el cuello de su esposo, y con una mano acarició su cabello. Por otro lado, el albino puso una mano detrás de la cabeza de su omega, profundizando el beso.
Seguido de unos minutos, ambos se separan por falta de aire. Pero mantuvieron sus frentes pegadas, escuchando la respiración agitada del otro.
— Llegarás tarde — le recordó Jayden entre jadeos.
Aleksander resoplo haciendo sonreír al omega.
— Antes de irme, tengo algo que darte — el omega frunció el ceño.
El alfa se estiró hasta la mesita de luz, que se encontraba cerca de la cama matrimonial y al abrir el primer cajón de la mesita de luz, saco un estuche negro.
— ¿Qué es? — pregunta Jayden tomando el estuche en sus manos.
— Una muestra de cuanto te amo — respondió el albino.
Cuando Jayden abrió el estuche negro de terciopelo se encontró con un hermoso anillo; La piedra central es una gema roja oscura, ovalada, brillante, hermosa. Rodeando aquella gema había pequeños diamantes claros, que estaban incrustados en el anillo. El metal del anillo parecía ser de oro rosa, lo que mostraba un color cálido y lujoso. Había un diseño detallado en las bandas del anillo, incluyendo formas que se asemejaban a hojas o tal vez pétalos adornados con más diamantes.
— Es hermoso — susurro admirando aquel anillo.
Aleksander saco el anillo del estuche elegante y agarro con suavidad la mano de su omega. Jayden sonrio cuando el alfa puso el anillo en su dedo y dejo un beso sobre sus nudillos.
— Este anillo, es la prueba de cuanto te amo, y del poder que tienes sobre mi. — Jayden lo miro — Te amo. Te he amado desde que te conoci. Jayden, amo cada detalle de ti. Se que, cuando estas ansioso mueves tu pierna derecha con nerviosismo, o a veces juegas con mechon de tu cabello. Cuando tienes frio sueles llevar una manta encima, taparte hasta la cabeza y hacerte bolita con tu propio cuerpo para darte calor. Se que te encanta la puesta de sol. Se que no te gusta sonreir, porque crees que no mereces hacerlo, pero yo me voy a esforzar dia con dia para que esa bonita sonrisa adorne tu rostro todos los dias de mi vida.
— Alek...— Jayden coloco las manos en las mejillas de su alfa — ¿Me amas? ¿De verdad? — una pequeña sonrisa se formo en su rostro — ¿Aunque tenga mis defectos? — Aleksander sonrio de lado, tomando sus mejillas y dejando un beso en su frente con delicadeza y ternura.
— Te amo, como nunca he amado a nadie mas. Y quiero que sepas que lo que tu llamas defectos, para mi son todo lo que te hace ser especial y unico.
El omega se acerco mas a el, hasta el punto de sentir sus respiraciones. El castaño observo aquellos ojos azules, aquellos que llamaron su atencion en el momento que los observo. Paso la vista a sus labios, observandolos por unos segundos antes de mirar nuevamente sus ojos.
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Un Voto De Honor Y Sangre | Duologia Dulce Condena #1
RomanceSus familias se odian desde siempre. Incluso ellos debian odiarse por los problemas del pasado, pero cuando un operativo sale mal, Vlad Románov y Victoria Ivanov, llegan a un acuerdo. En un intento de unir ambas mafias y familias, ambos líderes, co...