YeonJun tenía planeado pasar por Maylin exactamente a las seis en punto frente a la escuela de danza.
Ya había recogido todas sus cosas del departamento dejándolo tal como se lo entregaron el día que decidió rentarlo.
Iba en su Mustang, llevaba dos cheques consigo luego de haber trabajado un turno doble en la cocina de Joe's, con amabilidad pidió que le pagaran más temprano al igual que el cheque incluyera los sueldos que no había retirado en la última semana para poder acumular el más dinero posible ya que, se conocía y sabía que si ese dinero llegaba a sus manos no haría más que gastarlo en su bebé y novia.
Joe sonrío por la forma en la que el chico parecía estar sumamente ansioso y sobre todo, feliz; le preguntó si se estaba preparando para una gran noche.
一La mejor noche de mi vida, en realidad.
一Suerte entonces, muchacho.
YeonJun escuchó su carcajada antes de partir, se subió a su vehículo para después pasar con el señor Boyer, el dueño de la estación de gas. Desbordando su felicidad de dijo que iba a renunciar, recibió el otro cheque sin mucho conversación de por medio, pero antes de partir miró unos anillos en el aparador de la estación; no era sumamente fanático de las joyas, pero conocía a Maylin lo suficiente como para saber que portar una ahora que fueran marido y mujer le encantaría, con el poco efectivo que llevaba compró los anillos.
Observó la caja de los anillos mientras manejaba antes de seguir con su ruta, armando un plan en su cabeza. Iría al banco a cambiar los cheque y luego esperaría a Maylin donde acordaron con tiempo de sobra, cuando cruzó por Seventy-fifth Street y Ward Parkway, el reloj de la torre marcaba las seis menos diez por lo que sonrió, iba justo a tiempo.
Iba a casarse con Maylin luego de que ambos se marcharan juntos; todo estaba bien ahora. Desde que salió de prisión luego de ser condenado por robo su vida había cambiado a una mucho mejor de lo que esperaba, de las cosas que pasaron por su cabeza que pasarían luego de vivir en prisión no pensó que el amor sería una de ellas hasta que la vio a ella por primera vez, en el automóvil de su madre, distraída y algo despeinada, demasiado preciosa, a pesar de salir con esa mentalidad de la cárcel, luego de conocerla no hizo más que afirmarse más: debía cambiar.
Debía cambiar por ella, su Maylin.
También se sentía bien con el embarazo de ella, sería difícil tener un bebé, lo sabía de antemano ante las tantas historias que le contaban sobre los primeros meses de un bebé y todo lo cuidados que iba a requerir, el dinero que debía gastar, no era como él lo hubiera planeado, no por ahora, pero por su criatura y su Maylin sacaría lo mejor de la situación, más aún, se propuso a que sería un magnífico padre y marido, que los cuidaría a los dos pase lo que pase sin importar que, los protegería, él vería por ambos ya que ahora eran su familia por ende, las dos personas más importantes en su vida.
Los ojos de YeonJun miraron por el espejo retrovisor mientras sonreía por la imagen de un bebé junto a Maylin bailando en la sala de estar de la casa que él planeaba darles, sus ojos vieron de nuevo al vehículo que iba detrás de él desde el momento que salió de la estación de gas. Movió los dedos sobre el volante del auto, mordiendo su labio mientras esperaba la luz verde del semáforo.
Restó importancia al vehículo comenzando a avanzar por la calle mientras hacía algunos cálculos importantes. Les tomaría cuatro horas llegar a Pryor, Oklahoma, ahí alquilarían una habitación para pasar la noche, entonces a la mañana siguiente se casarían lo más temprano posible, bueno. en realidad él esperaría a que ella despertara para ir a la oficina municipal a casarse. Tamborileaba sobre el volante pensando en todos los papeles que llevaba en el maletero, tanto los de él como ella para que pudieran casarse e igualmente conseguir un trabajo, si nada salía mal, cuando fueran a desayunar a la mañana siguiente ya serían el señor y la señora Choi, al pensarlo YeonJun sonrió al aire y pisó el acelerador.
YOU ARE READING
⟡ what is love? ➵ choi yeonjun ⟡ ✓
FanfictionInicios de los años cincuenta. Los jóvenes viven al tope de la adrenalina, con las hormonas alborotadas y disfrutando cada día como si fuera el último, pero ella no... Maylin Jaffe era la chica con los padres judíos, educada para vivir una vida tran...
