El demonio radio encontró un libro misterioso en un callejón y al leer unas palabras grabadas en este fue teletransportado a un mundo donde todos eran ponis. Mientras él esté en este mundo aprenderá el significado de la amistad y compartirá a grande...
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En el salón del trono de Canterlot, la Princesa Celestia estaba absorta en la tarea de firmar documentos, su pluma moviéndose con precisión y elegancia.
Sin embargo, la tranquilidad del momento se vio interrumpida por la abrupta entrada de un guardia real, que irrumpió en la habitación con una expresión de angustia en su rostro.
Guardia real: Princesa... me temo que... eso... ya regresó.
La Princesa Celestia abrió mucho los ojos, sorprendida por la noticia, y luego miró al guardia que estaba a su lado. Con una voz amable pero firme, ordenó:
Princesa Celestia: Busquen a la Princesa Cadence y a Shining Armor.
El guardia asintió y corrió a cumplir con la orden, uniéndose a otros dos guardias que también se apresuraron a buscar a los solicitados.
Mientras tanto, la Princesa Celestia utilizó su magia para levitar un pergamino y una pluma, y comenzó a escribir con rapidez y precisión.
La carta que escribía era urgente, y pedía a los destinatarios que se dirigieran a Canterlot de inmediato.
Al terminar de escribir, la princesa selló la carta y la envió con su magia, asegurándose de que llegara a su destino lo antes posible.
Alastor estaba en una misión. Había estado buscando a esa unicornio oscura que lo había atacado meses atrás, pero hasta ahora, no había tenido suerte.
Solo había encontrado algunas manticoras y lobos de madera, que no eran rivales para su magia. Pero esa unicornio era diferente. Usaba magia de cristales, mucho más avanzada que la suya.
Alastor había estado buscando por todos lados, pero no había encontrado ni rastro de ella. Estaba empezando a perder la esperanza. ¿Dónde podría estar? ¿Por qué no podía encontrarla?
Mientras caminaba por el bosque, Alastor no podía dejar de pensar en la unicornio. ¿Qué quería de él? ¿Por qué lo había atacado? Tenía que encontrarla para responder a esas preguntas.
De repente, sintió una sensación extraña. La magia de Twilight lo alertó, como si algo estuviera sucediendo en Ponyville.
Alastor se detuvo un momento, escuchando su instinto. ¿Qué pasaba? ¿Tenía algo que ver con la unicornio que estaba buscando?
Alastor se teletransportó a la casa de Twilight, esperando encontrar alguna pista sobre la unicornio oscura.
Sin embargo, se encontró con una escena de orden y organización frenética. Twilight estaba revolviendo sus estantes y cajones con una velocidad y dedicación que sorprendió a Alastor.
Sus amigas, Pinkie Pie, Applejack, Rarity y Fluttershy, estaban sentadas en el sofá, mirando a Twilight con una mezcla de confusión y preocupación.
