Final

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Narra Ruben:
Volvimos a mi casa mientras nos tomabamos de la mano. Hoy iriamos a lo de Cheeto a festejar navidad ¿y que es mejor que pasar las fiestas junto a la persona que amas?. Se me hacia raro, muy jodidamente raro saber que Mangel y yo ahora estábamos juntos, raro pero feliz. Lo que primero eran "bromas", aunque a decir verdad nunca lo tome como una broma era demasiado....diferente a como trataba a mis otros amigos. Hemos tenido obstáculos pero llegamos a donde estamos ahora porque aunque pareciera imposible, que nunca ibamos a llegar, aqui estamos en la cumbre de esta montaña llena de cosas buenas y cosas malas. Cosas para seguir adelante. Capaz nunca nos esperamos estar juntos, ¿pero que mas podia pedir? Mangel me ama de verdad, eso lo aseguro. El me lo confirmó. Yo lo aml, soy correspondido y esta historia va a ser siempre asi ¿o no?.
Mangel estaba sentado en el sillón mientras yo divagaba en mi mente. Lo vi entretenido, con una sonrisa adornando su hermoso rostro. No me contuve, necesitaba estar con el. Pero de una manera diferemte. Todavia no habiamos tenido nuestra primera vez y creo que ya tenia la valentia de dar el siguiente paso. Me acerque a el, mientras me sentaba en su regazo poniendo cada pierna a su costado, arrodillado digamos. Me miro la boca mientras sus dedos deseosos se incrustaban en mi cintura.
-Rubiuh ¿puedo hacerte mio?- No hacia falta preguntarlo, solo asentí con un poco de vergüenza mientras Mangel empezó a atacar mis labios. Era como un cazador intentando capturar mi lengua. La encontró y no tardamos ni un segundo en empezar un vaiven. Me movia hacia adelante y hacia atras, y constantemente sacaba mi boca de la suya para depositarla en cu cuello. Nos despojamos de toda nuestra ropa mientras el me acostaba en el sillón y los besos húmedos seguían. Empezó a masturbarse y yo lo observe mientras me relamia los labios
-Quiero probarte- Susurré mientras lo dejaba a el abajo y empezaba a lamer toda su longitud, empezando a dejar marcas notorias. Mangel intentaba guardar los gemidos pero no aguanto. Cuando llegue a la punta y di dos intensas lamidas que me encantaron ya que su miembro era la gloria, empece a hacerlo mucho mas rápido. Era algo delicioso, muy......sabrosamente inexplicable. Mangel llegó hasta mi garganta y se corrió sin previo aviso. Me miro y comprendi, ya era el momento. Con mi inexperiencia, lo unico que supe fue ponerme en cuatro encima del sillón. No sabia otra manera. Me daba algo de pudor saber que Mangel tenía plena vista de mi ano y mi entrada, y que yo estaba completamente indefenso, pero iba a tener que superarlo. Me abrió un poco las piernas mientras introducia uno de sus dedos. Me quede mudó ¿esto no era penetrar y ya?
-Es pa-para dilatarte- Me puse rojo de la vergüenza, y cerre fuerte los ojos, era incómodo, un poco doloroso. Por suerte los saco despues de seguir experimentando y en ese momento, se empezó a introducir en mi. Ahogue un grito y aprete los ojos lo mas que pude. Me estaba rompiendo. Se detuvo y siguio con mas cuidado hasta que no pude mas y empece a moverme hacia atras para tener mas contacto con el. Más. Por suerte entendió y lo hizo mas rápido y fuerte llegando hacia mi prostata. Ma sostenia de la casera, y gemiamos demasiado fuerte. Con un par de penetraciones mas, nos corrimos. Si, me corri sin que me toque. Lo abrace y nos quedamls dormidos al instante.
* * *

Llegamos a lo de Cheeto demasiado agotados como para hacer nada pero con una sonrisa en nuestro rostro. Nos miro y guiñó un ojo y mis mejillas ardieron de pensar que el sabia nuestro secreto. Comimos y fuimos a la terraza para ver los fuegos artificiales con mas detalle. Cuando se hicieron laa doce el cielo se alumbro de distintos colores, y sin importar que estaba Cheeto, puse mis manos en su nuca mientras juntaba nuestros labios y nos besabamos sin pudor delante de tanta gente que se encontraba alli arriba.
-Feliz navidad, mi amor- Dije separándome de sus labios para volver a unirlos con muchisma mas intesidad
-Me importa una mierda lah fiestah, pero todo eh mejor cuando ehtoy contigo- Cheeto nos miró con la boca abierta.
-Entonces, ¿Rubelangel es real? Pero donde es que ¿como comenzó todo?- Nos sonrió y le dimos un pequeñp pero lindo abrazo.
-Todo comenzó en Tomorrowland- Dijimos al unísono y nos volvimos a besar.
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Es el final....

De la primera temporada.

Tomorrowland; rubelangelWo Geschichten leben. Entdecke jetzt