Fall (Larry Stylinson)

Capítulo XXV

Capítulo XXV

...¿entonces eso significa que él estará en la banda?- apunte al chico de la esquina de la sala. No podía creer lo rápido que los manager olvidaban a Harry y trataban de suplantarlo con alguien. Obviamente nunca encontrarían a alguien que lo pudiera suplantar.

-Este alguien tiene nombre, mi nombre es Justin y sé que no te gusta que yo este en lugar de Harry pero hago mi mejor intento.- dijo saliendo de la esquina donde estaba para dirigirse más hacia mi, que se creía ese.

-Tu jamás te acercarías a ser como él, ni en tus sueños más salvajes.- di un paso más cerca de él quedando a pocos centímetros tratando de parecer intimidante.

-Chicos, este no es el momento, Louis cálmate nadie suplantara a nadie es solo que la banda era conocida por tener a cinco chicos talentosos, sería extraño que solo sean cuatro ahora y estoy seguro que todos amarán a Bieber además tienen que hacer lo que yo diga.- nos fulmino con la mirada, me irrita ese hombre.-he terminado ahora pueden irse, mañana se dirá la noticia y espero que todos cumplan en contrato su concierto juntos será en un par de semanas, prepárense.- salimos de ahí porque al tipo no le gustaba "perder" su tiempo con nosotros porque estaba demasiado "ocupado". Bien ahora tenía que aguantar al cara de Ken.

Como era costumbre todos nos fuimos sin despedirnos, creo que el único que nos unía era Harry. Harry. Harry. Harry. Pienso mucho en él últimamente. Quizá todo el tiempo. ¿Por qué no hacerlo? Creo que en estos momentos es lo único que me mantiene con los pies en la tierra.

Quizá caminar no era la mejor opción pero quería hacerlo. Recordar mientras caminábamos Harry y yo por la calle y pensar en esas veces que rozaba su mano con la mía "accidentalmente" aja. Caminar y pensar en todas esas bromas que pude haber dicho para evitar los silencios incómodos. Decir en secreto todas esa palabras que me guarde mientras caminábamos por la tarde y el cielo estaba rosa. Mirar detenidamente todos esos lugares por los que pasábamos y trazar su rostro en mi mente imaginando que en este momento esta justo a mi lado. Tomando mi mano. Sonriéndome. Mirándome y sin decir palabras caminar por el atardecer. Así era mi vida perfecta. Yo, Harry, amor. Mire aquella casa donde Harry decía que algún día viviremos juntos y felices. Ese algún día jamás llegara, bueno si mis pensamientos de la muerte son como yo lo imagino la vida después de la muerte no existe. Cada persona deja de vivir y fin. Nunca he sido una persona que cree en dios, creo que nunca seré una persona que cree en él. El motivo es que nunca me dio esperanzas para hacerlo, ni a mi ni a mi familia. No me ayudo cuando le pedí que salvara a la abuela de aquel cáncer. Ni cuando mis tíos tuvieron aquel accidente automovilístico. No se porque le pedí algo, quizá porque no costaba nada intentar. Ahora tengo tantas cosas pero no tengo nada. Mis amigos, no existen. Mis padres se olvidaron de mi después de lo ocurrido con Harry ellos dicen que "necesito mi espacio" claro que no, yo necesitaba un abrazo de mi madre y que me dijera que todo estaría bien. Nunca paso. Él amor de mi vida se fue, el mejor amigo, compañero, novio, mi mejor complemento de vida. No hay gente que me apoye y pregunte si todo esta bien. Amy es buena persona pero es un poco deprimente, pensándolo ella ha perdido más o igual de cosas que yo. Solo me queda encontrar la cinta. He pensado en la posibilidad de morir y no escuchar la cinta número trece. Pero eso sería algo que los Tomlinson no podemos hacer, dejar las cosas a medias. Ahora solo quedaba una cosa por pensar ¿dónde esta la cinta?. Llegue a mi casa y entre directamente al despacho ahí yacían las cosas de Harry. Perfectamente acomodadas. Justo como a él le gustan. Si, quizá exagero pero creo que si en estos momentos él me esta mirando podría estar feliz de que he hecho las cosas bien. Tome la iPad y reproduje mi canción favorita. Una mezcla de los solos de Harry de todos nuestros discos comenzando desde the x factor hasta la última grabación días antes de que muriera.