Fall (Larry Stylinson)

Capítulo XXVII

Primero que nada perdón por tardar y gracias por leer mi historia.

Espero que les guste.

-

"¿Es normal que en el único lugar en donde quiera estar es con alguien que ya no esta?

Ayer soñé con él, suena raro pero es de la única manera en la que aún puedo recordar como era, creo estoy olvidando sus ojos, la forma de sus labios, no lo quiero olvidar pero... Siempre que sueño con él, él cae del cielo, sus alas negras están rotas y su rostro esta marcado por heridas y yo nunca lo puedo detener es como, es como si él fuera un ángel cayendo del cielo".

Mire a la señora Styles, era costumbre irla a visitar, tenía que cuidar de ellas, así fue como le prometí a Harry, él quería que las cosas fueran así, me sentaba en el sofá tomaba una taza de chocolate y miraba por la ventana hasta que se hacía de noche.

-Louis es tarde, puedes quedarte en la habitación de Ha...Harry.- parpadee mirando hacia ninguna parte, nadie lo había mencionado en mucho tiempo quizá para no lastimarnos más.

Sin decir nada camine hasta su antigua habitación, aún tenía las paredes azul y sus cosas perfectamente acomodadas, fotos de nosotros pequeños hasta la última de hace más de un año, éramos jóvenes, mi barba ha crecido y mi cabello esta largo.

Quien pensaría que este iba a ser nuestro destino. Yo aferrado al pasado y en verdad juro que lo extraño. Recordar todas esas veces que jugaba en el columpio del jardín mirando hacia la casa de enfrente, recordar cada sonrisa de sus labios, la forma en la que su voz ronca me erizaba la piel, la manera en la que nos mirábamos, para ser sólo unos niños ambos sabíamos que nos amábamos desde mucho tiempo atrás quizá desde el primer día en que nos vimos encontramos nuestro click*. Éramos solo unos niños. Libres de todo y con una vida por delante, ahora tu eres ceniza y yo estoy hecho pedazos.

Mire la pared el viejo calendario que colgaba con todos los meses rayados de fechas importantes, mi cumpleaños estaba marcado con un corazón, podía olvidar mi cumpleaños pero el siempre recordaba todo aún cuando no lo tuviera anotado, quizá si estuviera Harry aquí mañana me abrazaría y me diría lo feliz que está de que yo cumpla mis 24 años. Todos dicen que es la edad en la que eres realmente feliz, no creo poder ser feliz nunca más, no hasta que esté al lado de mi Harry.

Seguí mirando su habitación todo sigue igual desde que él murió, los pósters, sus discos, incluso aún tiene las mismas sábanas en su cama. Parecería que el tiempo no paso y aún el sigue vivo y todo es un mal sueño pero el espejo me mostró algo que no era hace años, infeliz.

Mañana es Navidad. Mañana cumplo otro año más de vida. Tendría que estar feliz, todos lo están por más infelices que sean.

Mire el reloj, faltaba una hora para que fuera media noche. Tome up all night, take me home, midnight memories y los comencé a reproducir, no todas, solo las canciones que más me recordaban a él. Siempre cuando estamos tristes somos tan masoquistas pero era un dolor que se sentía tan bien, escucharlo cantar era como si él aún estuviera aquí, repetir las canciones con las que nos identificamos una y otra vez, todos dirían que moments quedaría perfecta para la ocasión pero no había canción que me afectara más que over again.

"Don't promise that you're gonna write

Though promise that you'll call

Just promise that you won't forget we had it all"

Yo nunca lo voy a olvidar.

Termine de escuchar la música y mi misión estaba completada, llorar hasta desahogarme, era noche, y mañana seguramente todos se preguntarán por mi. Camine hacia la repisa para colocar perfectamente los CDs en su lugar pero tropecé con la alfombra y maldije a mis pies por ser tan torpes. Un Cd estaba roto y el plástico de la caja se rompió, bien ahora aparte de ser un idiota estaba sangrando. Baje a la cocina por un poco de gasas y alcohol para la herida. La nieve estaba cayendo fuera de la ventana de una forma muy peculiar que si en estos momentos Harry estuviera conmigo lo pondría romántico. Desde la ventana se podía ver la calle, las casas adornadas para Navidad, los carros pasar, incluso el hombre sentado en la banca de enfrente que miraba sus manos y de ves en cuando hacia la calle esperando algo. Lo mire por un par de minutos, tratando de imaginar la vida de ese hombre, podría ser un vagabundo o un hombre de negocios sin familia. El levanto la mirada hacia la ventana quizá hacia mi, pero no moví mi mirada. A lo lejos sonó la bocina de una camioneta, quizá su trasporte había llegado. Camino hacia la calle pero al llegar a la mitad se detuvo y me dio una última mirada, antes de que el carro deportivo rojo lo arrollara.

Me golpe la cara para ver si lo que acababa de ver era cierto, pero por más que me pellizcaba el hombre tirado a media calle no desaparecía. Corrí hacia él y lo abrace colocando mis manos por debajo de su cabeza preguntando si estaba bien. Pude ver que no pasaba de los 25 años y estaba sangrando de la cara y el pecho. Aún estaba consciente pero yo sabía que no por mucho, el golpe fue demasiado fuerte. El chico solo me miro y me dijo:

-pudiste haberlo salvado al igual que a mi.- y después de eso cerró los ojos y entendí que ya había muerto. Mire hacia el carro pero la calle estaba desierta, la nieve estaba otra vez en su forma de inicio como si nunca hubiese pasado ningún carro por horas y después mire al chico y me vi reflejado en él, sólo que yo era él que estaba muerto y no él. Lo solté y corrí. Corrí como si me estuvieran persiguiendo pero nunca mire hacia atrás, yo solo corrí cuadras completas, como si fuera solo un sueño y no me importara pero me di cuenta de que no era un sueño cuando tropecé con la rama de un árbol y caí, pero no tenía ganas de seguir corriendo o levantarme y sólo cerré los ojos por un momento.