Capítulo Cinco: ¡Sólo corre!

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Al acabar la clase de sociales, Evan se levanta de su sitio y se va a hablar con Karen.

Sí, con Karen.

Me quedo sentada en mi sitio, observando como se aleja de mi sin decir ni una palabra.

¿Desde cuando son amigos?

El día que Evan vino, no hablaron, ni nada...O eso creo.

L-lo pienso porque él pasó casi todo el día conmigo, n-no es que lo observe siempre...

—¡Hey!¿En qué piensas, Erika?—alguien me llama, y reconozco la voz de la rubia de Lucy.

¡Es el momento de hacerle la broma!

—En nada, Lucy Heartfilia—contesto, riendo.

Ella odia que la llamen así, más que nada porque no le cae nada bien ese personaje, el cual es protagonista del anime Fairy Tail.

—¡Deja de llamarme así!—exclama, molesta.

Me gustaría hablar con los demás como hablo con ella.

Sin duda, haré que eso sea posible.

—Por cierto, Erika...Keira me ha dicho que necesitabas ayuda para recuperar tu manga de Noragami...—me recuerda mi amiga.

Vaya, realmente se me había olvidado que lo había perdido...

Ahora mismo me doy vergüenza a mi misma como otaku...

¿Por qué se me ha olvidado?

Nunca se me olvidan estas cosas.

Miro a Evan, riendo con Karen como si la conociera de toda la vida.

No puedo describir que es exactamente lo que estoy sintiendo al verlos, pero no es bueno.

—Sí, es cierto...Se lo quedó Lucio...¿Me...Podrías ayudar?Tú siempre tienes buenas ideas—le digo, murmurando la última parte.

Ella me da golpecitos en la cabeza, sonriendo.

—¡Claro que sí, boba!

—¡Muchas gracias, Lucy!

La verdad es que me alegro mucho de tener unas amigas tan geniales...

No sé que haría sin ellas...

—Bien...Primero de todo...Erika¿Has pensado en pedirle directamente que te lo dé?Conociéndole, seguro que se le ha olvidado que lo tiene y te lo dará en seguida—dice, con una mano en la barbilla.

Vaya...Esa solución parece demasiado fácil...

Pero bueno, en el caso de que fallara, siempre se puede buscar otra manera.

—De acuerdo, gracias, Lucy—le digo, sonriendo

Bueno...Tendré que buscar al Profesor en el tiempo de patio...Es decir...¡Ahora!

No me dará tiempo a merendar, así que mejor no cojo la comida que mamá me ha preparado hoy.

Me dirijo a la puerta, y salgo de la clase.

Bien...En el pasillo sólo veo algunos profesores y un montón de alumnos que van de aquí para allá para salir al patio.

En fin, un caos total.

¡Así no habrá manera de encontrar a Lucio!

Aprieto los dientes y decido meterme en el barullo de gente.

¡Es un escándalo, hay personas que te empujan por todos lados!

Debería haber salido con mis amigas...No hay ni un hueco de pasillo libre de gente.

¡Yo no soy Yato!Where stories live. Discover now